El presidente no tuvo suerte ayer en el Congreso a la hora de sumar apoyos a su plan para cambiar el modelo económico. Aunque Zapatero parecía dispuesto a negociar casi cada punto de los propuestos en su famoso anteproyecto de Ley de Economía Sostenible, nadie quiso recoger su guante. De hecho, como explica hoy El País en su principal subtítulo de portada, “todos los grupos de la oposición descalifican el plan del Gobierno”. ¿Quizá sea por la falta de precisión del político socialista al exponer sus ideas? Si es así, tal vez haya más puntos de contacto que los que parece a primera vista entre el líder español y el presidente de EEUU, Barack Obama, a quien el diario de Prisa dedica hoy uno de sus editoriales. El texto tacha de voluntarista y poco concreto el plan del inquilino de la Casa Blanca para ‘ganar la guerra en Afganistán’.
Pero esa sintonía con el hombre más poderoso del mundo no le permite a Zapatero encontrar amigos más cercanos. Muchos prefieren declararse en consonancia con Rajoy. Como por ejemplo, Gerardo Díaz Ferrán quien, según cuenta hoy El Mundo, se encuentra en total sintonía con el jefe del PP en lo que respecta a sus opiniones sobre el famoso anteproyecto de Ley de marras. No sabemos si esta opinión agradará o no a un Gabinete necesitado de señas de identidad izquierdista para recuperar expectativas de voto. Y no lo tiene fácil. Por eso siempre se agradece la existencia de algunos enemigos tradicionales que, por pura contraposición, ayudan a definir una imagen progresista a quien quizá no lo sea del todo.
La Iglesia siempre está ahí para buscar el choque, como cuenta ABC en su portada de hoy donde informa de la intención del Ejecutivo de aprobar una ley para que se retiren todos los crucifijos de los colegios. Bonito campo de batalla para renovar un enfrentamiento clásico que últimamente resultaba un tanto monocorde por culpa de la reforma de la Ley del Aborto. La pugna servirá sin duda a los contendientes para mantener a las tropas listas para tomar las calles cualquier día de estos.
