El caso de las facturas falsas de más de 4,4 millones de euros durante los ejercicios de 2000 y 2001 en las obras realizados para el parque temático Terra Mítica puede tener sus días acabados en los tribunales y con él la polémica por la relación en este caso del por entonces ex presidente de la Generalitat valenciana, Eduardo Zaplana. Según han asegurado a EL BOLETIN observadores políticos de la región, el juez instructor del caso ha dictaminado que este delito de estafa ha prescrito.
La denuncia del Ministerio Fiscal que inició este procedimiento se desvanece con esta noticia. “La artillería legal de Zaplana”, según aseguran estas fuentes, “se ha puesto manos a la obra en este asunto y han encontrado un defecto de forma en la notificación de Hacienda respecto al presunto delito a los denunciados”. “Si esto se prescribe, todas las denuncias que vinieron después, también” recalcan estos observadores.
El ex ministro Eduardo Zaplana se ‘libra’ así de ver su nombre empañado en un delito de fraude fiscal y es que, uno de los principales, supuestos, culpables de estas facturas falsas fue el empresario Vicente Conesa, cercano al dirigente popular desde su etapa como alcalde de Benidorm. Relación que continuó cuando Zaplana se alzó a la presidencia de la Generalitat valenciana.
El posible cierre de este caso ha traído a la memoria de muchos el archivo de causas en las que los populares han estado ante la espada y la pared. “Desde el ‘caso Naseiro’, los tejemanejes del entorno de Zaplana no han cesado”, insistían estas fuentes.
Poco pueden hacer las demás fuerzas que denunciaron como el PSPV tras la decisión judicial.
