Telecom Italia ha negado a la agencia Dow Jones que sólo haya dos interesados en adquirir el 50% del capital que posee en Telecom Argentina, tal y como afirmaban algunos medios que señalaban al operador de aeropuertos Corporación América y al empresario argentino Alfredo Román. La primera habría realizado una oferta de 580 millones de dólares, mientras que la del segundo sería de 630 millones.
Aún no está claro si la operadora italiana tendrá que verse obligada a realizar la desinversión, sobre todo después de que la Justicia del país latinoamericano anulara la orden gubernamental de Cristina Fernández, que había abandonado sus planes de estatalizar la compañía transalpina, pero estaba decidida a poner fin al supuesto “monopolio” en el sector de las telecomunicaciones locales y, de paso, aumentar más su control en este sector estratégico con la venta de la participación de Telecom Italia a uno de los conocidos como ‘empresarios K’ (cercanos al Gobierno).
Según indicaba el reciente fallo de un Tribunal del país “las empresas extranjeras a las que se obliga a la desinversión (…) no fueron escuchadas ni tampoco advertidas, de manera que pudieran expresar, ya fueran sus descargos o sus explicaciones o argumentos a lo que se encontraba en tratamiento”. Cristina Fernández había tomado esta decisión al considerar que el ingreso de Telefónica en el capital Telecom Italia (algo que sucedió hace tres años) generaba una posición dominante en el mercado local.
