Acosado por la casi decena de sondeos electorales que vaticinan una histórica derrota del PSOE en Andalucía, el presidente de la Junta, el socialista José Antonio Griñán, ha dado un vuelco a su equipo de Gobierno para relanzar su imagen y la de su Ejecutivo ante los votantes.
Tras el paso durante este puente del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y de todos los ministros por Sevilla con motivo de un Consejo de Ministros ‘especial’ para la región por el acuerdo sobre el pago de la ‘deuda histórica’, Griñán ha decidido no aplazar más un cambio de carteras en la Junta.
A falta de que esta tarde se haga oficial, el líder socialista andaluz ha dado todo un vuelco en su equipo y ha movido sillas y ha fusionado consejerías. La notable reestructuración se traduce en el fin de los departamentos de Justicia y Administración Pública y el de Vivienda y Ordenación del Territorio. Estas labores se fusionan con otras consejerías: Justicia pasa a Gobernación, Administración del Territorio será responsabilidad de Hacienda y Vivienda y Ordenación del Territorio se unen a Obras Públicas y todo recaerá en manos de Rosa Aguilar.
Si no fueran bastantes los cambios de ‘letreros’ en los edificios de la Junta, Griñán ha incluido también un cambio de nombres en los despachos. Hasta cuatro son los nuevos nombres que ha puesto sobre la mesa el socialista andaluz para relanzar la imagen de su Ejecutivo ante los votantes.
Mar Moreno deja Educación para pasar a ser su ‘número dos’ al frente de Presidencia, en un intento por tener a su lado a la persona que más apuestas lideraba ante los rumores de la salida de Manuel Chaves de la Junta.
El cambio de silla de Moreno ha provocado la entrada de nuevas caras como el secretario provincial del PSOE de Granada, Francisco Álvarez de la Chica, que se encargará de Educación, y de Manuel Recio que será consejero de Empleo.
Griñán espera que estos esfuerzos se vean reflejados en los próximos meses cuando una nueva oleada de encuestas electorales midan la labor del presidente andaluz y de su equipo al frente de la Junta. Un trabajo que hasta ahora no ha contado con el apoyo de los votantes que exigen un cambio en la política autonómica, nuevo rumbo para el que señalan al popular Javier Arenas como el ‘capitán’.
La remodelación del Gobierno de Griñán cumple con la apuesta por el recorte en organismos públicos que esta misma tarde el Ejecutivo le pedirá a las autonomías y los ayuntamientos en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera. De las 15 consejerías que tenía ha pasado a 13.
El secretario general del IU de Andalucía, Diego Valderas, en declaraciones a EL BOLETIN, ha criticado la decisión de Griñán de poner ‘caras nuevas’ en vez de presentar medidas contra la crisis. “Es necesario un cambio político para que la crisis no vaya a peor”. Cambio que pasa por la celebración de un debate sobre el estado de la región -hace dos años del último- en el que se incluyan nuevas iniciativas y se busque una alianza de la izquierda contra el PP. Unión con el PSOE que pasa por que Griñán “deje de mirar a la derecha y gire en sus políticas”, ha destacado Valderas.
