La Xunta gallega confía en que “esta misma semana” Caixa Galicia y Caixanova lleguen a un acuerdo definitivo para su fusión. Así lo han señalado fuentes de la consejería de Economía a EL BOLETÍN, que no obstante han reconocido que “la decisión final corresponderá a las propias cajas”.
Sin embargo, la reunión mantenida ayer con el Banco de España mostró que la fusión es “viable”, tal y como siempre había defendido el Gobierno de Núñez Feijóo. Tras la reunión con el regulador, está previsto que hoy mismo ambas entidades reanuden sus contactos oficiales, donde el principal escollo parece el reparto del poder. Mientras Caixa Galicia ha defendido siempre “una fusión equilibrada”, Caixanova pretende convertirse en la entidad absorbente.
De concretarse el proceso, las cajas deberían pedir al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) 1.162 millones de euros. También implicaría el cierre de 204 oficinas y un recorte de al menos 990 empleados.
