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La huelga general contra la reforma laboral anunciada ayer p

La huelga general contra la reforma laboral anunciada ayer por los sindicatos abre todas las portadas, aunque los diarios destacan distintos aspectos de esta protesta que sería la primera huelga general contra Zapatero y el séptimo paro de la democracia. El País recalca el final de seis años de paz social y que “los sindicatos han retirado ya a José Luis Rodríguez Zapatero el voto de confianza del que ha gozado desde que llegó al poder” y El Mundo destaca la soledad del presidente, una soledad que se le nota en la cara. Y es que Pedrojota lleva a su portada un primer plano de “las ojeras de la crisis” que luce ZP, dando por buenas las palabras de Felipe González, convertido ahora en un oráculo, de que al jefe del Ejecutivo “le ha golpeado la realidad de la crisis” y “eso se le nota físicamente”. En su editorial, Pedrojota resalta la “debilidad politiza” que, a su juicio, supone que tenga que aprobar por imposición la reforma como un proyecto de ley, y dice que habrá que ver hasta dónde puede llegar en unas circunstancias tan adversas “aunque Zapatero haya demostrado que es un político que no tira fácilmente la toalla”. Abc, por su parte, no espera nada del jefe del Ejecutivo e insiste, erre que erre, que es el momento “para llamar a los ciudadanos a las urnas”.

Otro aspecto económico que manda en la prensa son las sospechas que la prensa alemana vierte contra España, con la ayuda inestimable de Merkel, sobre un supuesto plan de rescate, algo que no teme El País, al que sí preocupa, sin embargo, que la banca española sólo pueda acceder al BCE, al que ha pedido en mayo préstamos récord por 85.600 millones ante la falta de liquidez de los mercados. El de Prisa advierte que “lo peor para la banca española está por llegar” y que “la solución consiste en recuperar la confianza de los inversores mediante una reforma creíble de las cajas de ahorros, que incluya una rápida recapitalización” y. en cuanto a los bancos, vaticina un “largo periodo de recurso importante al BCE”.

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