La batalla por liderar la patronal empresarial ha traspasado las filas de la CEOE y cuenta con dos nuevos protagonistas. Tanto el PSOE como el PP han decidido irrumpir en este proceso electoral que llevará a las urnas a los empresarios el próximo 21 de diciembre. Socialistas y populares intentan influir en los posibles candidatos que sustituyan a Gerardo Díaz Ferrán en la presidencia. Cada partido se esfuerza en mostrar las cualidades de su ‘elegido’.
Así, consejeros de la Junta de Andalucía presidida por el socialista José Antonio Griñán se afanan en resaltar las cualidades negociadoras del presidente de la patronal andaluza y vicepresidente de la CEOE, Santiago Herrero. Un posible candidato que no desea el PP para el futuro de la CEOE. Destacados dirigentes populares han trasladado a EL BOLETIN su negativa a que Herrera suceda a Díaz Ferrán. Los motivos de estos expertos económicos del PP es su excesiva ‘amistad’ con la Junta de Andalucía. Una relación que para los populares le convierte en un candidato demasiado “politizado”. La disputa entre PSOE y PP por ‘controlar’ la patronal tiene visos de ir a más y se unirá a la lucha que entre los empresarios hay por este cargo.
Menos de dos meses, hasta el próximo 14 de diciembre, tienen de plazo los empresarios que quieran liderar la CEOE. Para ello no sólo los candidatos van a necesitar los votos del resto de representantes empresariales, sino también el beneplácito de partidos como el PP. Expertos económicos del partido han empezado a dar su opinión sobre quién debería ser el candidato y quién no.
Así, entre los nombres que censuran los dirigentes del PP se encuentra uno de los favoritos en las apuestas, el presidente de la patronal de Andalucía, Santiago Herrero. “El próximo presidente de la patronal empresarial debe ser neutral políticamente, o si no, lo menos relacionado con la política”, han señalado a este diario miembros del PP. Cualidad que para los representantes populares no cumple Herrero, ya que ha mantenido una estrecha relación con la Junta de Andalucía que preside el socialista José Antonio Griñán. Una muestra de esta ‘amistad’ se puso en evidencia hace apenas quince días. Dos cargos del Ejecutivo andaluz, la consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo, y el consejero de Empleo, Manuel Recio, alabaron el “talante negociador” de Herrero y destacaron el “excelente” presidente que sería de la CEOE.
Manifestaciones como esta figuran en el discurso que dirigentes del PP esgrimen cuando se les pregunta sobre el futuro de la patronal empresarial. Un horizonte que se abre tras la renuncia de Gerardo Díaz Ferrán de presentarse a la reelección como máximo responsable de la CEOE. Dicha decisión es una “buena noticia” para los representantes populares que aseguran que la situación en el seno empresarial era insostenible. “No se podía seguir así, estaba demasiado salpicado por escándalos con sus empresas”, recalcan.
Además de torpedear la candidatura de Santiago Herrero, el PP ha apostado sobre quienes podrían ser, en su opinión, los candidatos a batirse en las urnas de la patronal. A la figura del presidente de la patronal catalana, Joan Rosell, que aparece en muchas quinielas, los populares añaden el nombre de Arturo Fernández, líder de los empresarios madrileños. Argumentan que a pesar de estar relacionado con Aguirre, su implicación política no es tanta como la de Herrero.
El que parece haberse caído de la carrera electoral es el ex presidente de Endesa y ex diputado del PP Manuel Pizarro, que ha cerrado la puerta a encabezar una candidatura para presidir la patronal empresarial.
