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Blanco acusa a Alvárez Cascos de provocar la crisis de las concesionarias de autopistas

El ministro de Fomento, José Blanco, ha culpado al ex titular de esta cartera en el Gobierno del PP, Francisco Álvarez Cascos, de la grave situación económica que atraviesan las empresas concesionarias de las autopistas de peaje. Blanco, quien recordó que la Ley del Suelo de 1998 cuadriplicó el coste de las expropiaciones, aclaró que esa “herencia” costará ahora a los españoles 1.400 millones de euros.

Blanco se mostró así de contundente durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso, en respuesta a una pregunta del diputado popular Andrés Ayala. Así, el titular de Fomento recordó que la Ley del Suelo de 1998 multiplicó por cuatro el coste de las expropiaciones que fueron necesarias para construir las autopistas de peaje, cuando inicialmente se había previsto una suma de 300 millones de euros. La “mala planificación y el derroche de gasto” del Gobierno de José María Aznar, continuó Blanco, costará ahora a los españoles 1.400 millones de euros.

Esta suma se refiere al plan de rescate que prepara el Ejecutivo para que las concesionarias eviten la quiebra. Este año, el Ministerio de Fomento ha destinado 250 millones de euros en préstamos participativos al sector y prevé incluir una partida de 135 millones de euros para 2011. Esta última cifra podría incrementarse hasta 250 millones de euros si se aprueba una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado, presentada por el Grupo Socialista. Además, el PSOE está negociando con PP y CiU elevar esa dotación, después de que los nacionalistas catalanes propusieran que el Estado cubra la diferencia cuando el tráfico de esas autopistas no supere el 80% de lo previsto inicialmente.

A pesar de ello, la patronal de las concesionarias, Aseta, considera insuficiente las cifras de las que se está hablando. Así, fuentes de la asociación explicaron a EL BOLETIN que para poder evitar la quiebra este año necesitan 350 millones de euros. Además, señalan que el año que viene serán necesarios 800 millones de euros. Las compañías concesionarias reclaman al Estado “la restitución del equilibrio financiero de las concesionarias” dado que “el déficit que éstas arrastran se debe a causas ajenas a las empresas”.

Como ejemplo de estas “causas ajenas” citan la autopista que une Madrid con Toledo, la Ap-41. En este caso, según explican estas fuentes, la licitación de la concesión incluía una futura ampliación hasta Ciudad Real, tramo que nunca se realizó. Además, recuerdan que se construyó una autovía gratuita paralela a la Ap-41, con lo que las concesionarias no consiguen reactivar el tráfico por la autopista de peaje.

Más problemas

La gestión de las autopistas de peaje no es el único problema que atraviesan algunas de estas empresas. Sus filiales de servicios de limpieza afrontan una difícil situación económica como consecuencia de los impagos de algunos ayuntamientos. El Ayuntamiento de Madrid destaca como el más endeudado de todos.

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