El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha aprovechado los prolegómenos de la Convención Nacional del partido en Sevilla para asegurar que “una mayoría de ciudadanos sienten” que el cambio de Gobierno es ya “una necesidad nacional”. El líder del principal partido de la oposición, ante la atenta mirada de una representación de alcaldes del PP, ha realizado un discurso triunfalista ante las encuestas que pronostican una amplia victoria del PP tanto en las elecciones de mayo como en las generales. “No soplan vientos de cambio porque sí”, ha destacado.
El dirigente popular ha enviado un mensaje a los ciudadanos de que pueden contar con el PP ante la crisis económica y los altos datos de desempleo, ya que el Partido Popular es una formación que puede generar la confianza que necesitan. Los votantes “tienen desazón y necesitan” un Gobierno que les ayude en estos momentos de incertidumbre. Junto al triunfalismo, Rajoy se ha mostrado hoy dialogante y abierto y ha realizado una invitación a la “concordia” frente a la “división”. “Queremos sumar, no dividir”, ha insistido el líder popular que ha evitado en su intervención elevar el tono para atacar al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Las palabras del presidente del PP se producen el mismo día en el que la Cadena SER ha hecho público un sondeo que muestra que los españoles tienen más confianza en el PP que en el PSOE. El 40% de los preguntados confían en el PP para salir de la crisis, mientras que esta cifra se reduce en el caso del PSOE y se queda en un 26%, al igual que el número de encuestados que no respalda a ninguno de los dos partidos. Asimismo, para el 42% una victoria de los populares en las elecciones generales sería una buena noticia, para el 39% una mala noticia. El entusiasmo sobre estos datos se diluye cuando se pregunta a los ciudadanos por la labor de oposición del PP durante la crisis, ya que el 70% de los encuestados creen que Rajoy ha actuado irresponsablemente. Para terminar, en este sondeo se evidencia que el PP continúa sin dar a conocer sus planes económicos, lo que provoca cierta desconfianza.
Esta encuesta, y los datos positivos que se muestran en ella, se une a los sondeos que en los últimos meses pronostican una victoria fácil del PP en las elecciones autonómicas y locales del próximo 22 de mayo y en las generales que, previsiblemente, se celebren en 2012. A pesar de este optimismo, Rajoy tiene ante sí varios un grave problema con los motines que en los PP regionales se han empezado a desatar por las candidaturas electorales y que pueden truncar sus éxitos.
Motines
En plena Convención Nacional en Sevilla para iniciar la precampaña y con las encuestas a su favor, el PP muestra su preocupación por los motines que se han desatado en el seno del partido por las candidaturas a las elecciones de mayo. Así, dirigentes de la dirección nacional se pondrán desde este mismo lunes a solucionar peleas internas como la desatada en Benidorm entre ‘zaplanistas’ y afines a Francisco Camps.
“Nada más terminar el congreso, el mismo lunes, estudiaremos las situaciones de las candidaturas regionales”, ha asegurado a EL BOLETIN una destacada responsable de la estrategia electoral y de organización de Génova. Y es que, en el seno de la dirección nacional se mira con preocupación las luchas internas que en algunos sectores del partido se están dando por los cabezas de lista en las elecciones de mayo y que podrían repercutir negativamente en unas muy favorables encuestas electorales.
Entre los asuntos que están sobre la mesa de Mariano Rajoy y sus responsables electorales se encuentra la batalla entre los seguidores de José Joaquín Ripoll, conocidos como ‘zaplanistas, y los afines a Francisco Camps. Ambos sectores del PP se enfrentan por la alcaldía de Benidorm, ahora en manos de unos tránsfugas del PSOE valenciano, y han anunciado a sus candidatos. “Esto no se hace así, no puede decir un dirigente que quiere ser el cabeza de lista -algo que sí ha hecho la candidata ‘zaplanista’ Gema Amor-. Somos nosotros los que decidimos a través del Comité Electoral”, ha asegurado la mencionada dirigente de la cúpula directiva del partido.
Además de actuar ante este motín, Rajoy tendrá que mirar hacia su tierra de origen, Galicia, y gestionar una delicada petición. El PP del Concejo de Mos, cerca de Vigo, quiere como cabeza de lista a la actual alcaldesa, la independiente Nidia Arévalo, que fue militante popular hasta que dejó el partido para arrebatar la alcaldía al PSOE a través de una moción de censura, lo que fue declarado como caso de transfuguismo. Gracias a esto, el PP gobierna en este concejo. Esta propuesta, que necesita el beneplácito de Génova, dejaría en evidencia las críticas que el propio presidente del partido ha hecho a los socialistas por arrebatarle Benidorm al PP con un caso de transfuguismo.
Ambos ejemplos de motines regionales se producen en autonomías en las que Rajoy se juega mucho el mes de mayo. En Galicia, reforzar la victoria lograda por Alberto Núñez Feijóo. En Valencia, que la vinculación de Camps en el ‘caso Gürtel’ no pase factura.
A cuenta gotas
Antes estas ‘rebeliones’, Génova ha decidido aprobar las candidaturas a cuenta gotas y, en paquetes de cuatro o cinco, a través del Comité Electoral que da el visto bueno a los cabezas de lista.
