Dominique Strauss-Kahn, ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) y ex candidato a asumir la responsabilidad de los socialistas franceses para derrotar al presidente galo, Nicolas Sarkozy, en las próximas elecciones general de este país, ya no supone ningún peligro después de haber renunciado a todas sus aspiraciones políticas. Así es como ven algunos observadores a los que alude el diario The New York Times el hecho de que los encargados de detener hace dos meses en Nueva York al político galo, acusado de intento de violación, ahora declaren no tener pruebas suficientes para mantener esas acusaciones.
Esta aparente falta de pruebas para mantener retenido y bajo vigilancia a Strauss-Kahn, que se encuentra a la espera de que se celebre el juicio en la ciudad estadounidense, ha salido a la luz apenas unos días después de que el FMI haya nombrado a un nuevo responsable al frente de la institución (Christine Lagarde, actual ministra de Finanzas gala y aliada política de Sarkozy), tras la renuncia presentada por el socialista francés poco después de ser arrestado. Y también han salido a la luz pocos días después de que se hayan hecho oficiales los candidatos del Partido Socialista galo para tratar de arrebatar el poder al mandatario conservador dentro de unos meses. Evidentemente, Strauss-Kahn no está entre los elegidos a pesar de que hace tan sólo dos meses (hasta el momento de su detención) era el favorito ya no sólo de la izquierda francesa sino, según las encuestas de entonces, de la mayoría de ciudadanos del país europeo para gobernar la nación.
Según informa el rotativo neoyorquino, los encargados de la investigación han reconocido que existe una conversación por la que se puede demostrar que, si bien sí hubo un encuentro de carácter sexual entre Strauss-Kahn y una joven camarera guineana del hotel Sofitel ubicado en Manhattan, éste no fue forzado. Al parecer, la trabajadora del hotel habría hablado por teléfono unas horas antes de subir a la habitación del ex director del FMI -donde supuestamente se produjo la retención ilegal y la agresión sexual- con un conocido suyo (que cuenta en su historial con varios delitos penales relacionados con el tráfico de drogas y el blanqueo de dinero) analizando cuánto dinero podrían ganar con una falsa acusación de la misma índole de la que luego fue presentada ante la policía.
Strauss-Kahn fue detenido cuando ya se encontraba dentro de un avión de Air France -en teoría, en territorio internacional- en el aeropuerto JFK de Nueva York con destino a Europa, en donde tenía pensado reunirse horas después con la canciller alemana, Angela Merkel, para debatir los siguientes pasos a seguir en la crisis de deuda que atraviesa desde hace un año y medio la zona del euro.
