Que la SGAE y Teddy Bautista no son precisamente muy queridos es algo que ha quedado muy claro en las tertulias radiofónicas mañaneras, aunque en todas las emisoras se ha pedido prudencia en las críticas argumentado la presunción de inocencia. Además, Ignacio Camacho, dijo en Onda Cero que no es partidario de la lapidación que se está haciendo en Internet de esta sociedad y su presidente a pesar de que es un personaje “profundamente antipático” que se ha “ganado a pulso por su gestión opaca y su voracidad excesiva” los “odios a mansalva” que se reparten hoy por las redes sociales. Su compañero Paco Reyero reconoció que “nunca un recaudador de impuestos ha tenido buena imagen, mientras que Pilar Cernuda ponía el acento en que “no entiende” por qué se envió a la Guardia Civil dos horas después de finalizar el recuento de las elecciones, y dijo que “se podría haber actuado con un poquito más de cabeza”.
En la SER, Antón Losada considera la imputación de estos tres delitos “un duro golpe para una causa escasa de apoyos, más bien cuenta con un número importante de críticos” y ha asegurado que estamos ante el final de una época y de un modelo de gestión de los derechos de autor. Josep Ramoneda destaca que a nadie le ha extrañado demasiado esta operación, para luego señalar que es una organización opaca, faraónica y que trabajaba como un monopolio con una vocación policial y acosadora nada simpática.
Sobre el futuro de Bautista hablaron en la COPE donde Fermín Bocos dijo que quizá no debe dimitir con la ley en la mano, pero sí por estética e imagen y cree que la arrogancia con la que ha actuado la SGAE le ha acarreado la mala fama.
A micro cerrado
Pedro J Ramírez. ha señalado en la COPE que este año no es el posado de Ana Obregón el que ha dado el pistoletazo de salida al verano, sino el baño de Leire Pajín en una playa de Menorca junto a su padre y su madre, “una imagen muy española y familiar”, apuntó el tertuliano de la emisora episcopal y director del diario El Mundo.
