La empresa surcoreana Samsung tiene intención de pedir legalmente la suspensión de ventas de la quinta versión del iPhone en el resto del mundo y además vaticina cambios en la estrategia en el conflicto de patentes.
La guerra que desde abril mantienen Samsung y Apple por el diseño y patentes de tabletas y teléfonos móviles de última generación a lo largo y ancho el mundo parece no tener fin. Aunque de momento solo la empresa de la manzana ha podido detener las ventas de su rival.
Samsung parece mostrarse más agresiva cuando asegura que “Apple estaba utilizando gratuitamente nuestras tecnologías móvil”. De este modo, el intercambio de denuncias parece que se prolongará aún más en el tiempo.
