A este paso a cle va a pasar lo que a Nicolas Sarkozy: que se va a hablar más de su pareja que de él. Su compañera sentimental Valérie Trierweiler, está haciendo correr ríos de tinta, ya que se niega a pasar por la vicaría, quiere seguir ejerciendo su profesión de periodista, lo que algunos analistas políticos consideran incompatible con su nuevo papel , y por si fuera poco ‘luce pierna’ en su primer acto oficial.
El hecho de que François Hollande y Valérie Trierweiler sean la primera pareja no casada que reside el Palacio del Elíseo en toda la historia de la República Francesa ha provocado verdaderos quebraderos de cabeza a los servicios de protocolo, ya que se teme que esta circunstancia pueda ser un problema en algunos viajes al extranjero, especialmente en países de costumbres muy conservadoras, pero la primera prueba de fuego, el viaje de Hollande a EEUU para entrevistarse con Barack Obama, parece haber sido superado con éxito, ya que la esposa del presidente estadounidense le ha allanado el camino.
Según americainfobae.com, la portavoz de la presidencia estadounidense, Caitlin Hayden, dijo que el hecho de que la Trierweiler no sea la esposa de Hollande no supone ninguna problema, por lo que ha sido invitado a participar en todos los actos tanto “n Chicago (en la Cumbre de la Alianza Atlántica) como en la reunión del Grupo de los 8 en Camp David. Nos complace recibirla en los Estados Unidos», portavoz de la Presidencia estadounidense. «No hay ninguna regla sobre cómo se manejan estos temas», insistió.
Sin embargo, y aunque en algunos países la condición de soltera de Trierweiler no plantee demasiadas reticencias, sí podría suponer un hándicap para que acompañe a Hollande a algunos destinos, como la mayoría de los países árabes.
Un ejemplo es el Vaticano donde, no reciben a las compañeras sentimentales de ningún jefe de Estado y gobierno, y algunos medios de comunicación hacen notar que Nicolas Sarkozy tuvo que ir solo a la Santa Sede, lo mismo que en su visita a la India, que se produjo en las primeras semanas de su relación con la artista italiana, ya que las costumbres indias no permitían recibir a un presidente acompañado de una mujer que no fuera su ‘legítima’ mujer, un motivo, por el que se dice que Sarkozy y Bruni contrajeron matrimonio rápidamente.
Además de la novedad que supone su estado civil, también es tema de conversación que esta mujer de 47 años no quiera dejar su profesión de periodista, lo que muchos analistas políticos consideran inapropiado para su cargo.
Pero además, y como las comparaciones son odiosas, Valérie acaparó toda la atención en el relevo con Bruni, que no es algo habitual suceder en el Elíseo a una bella artista. Y según muchos expertos en esto del estilismo y la elegancia, la periodista ganó a la cantante por goleada y también, que todo hay que decirlo, gracias al viento que mostró una de sus piernas a través de una abertura lateral de su vestido negro. Dicen que tiene un bello físico y un estilazo. O sea, que esto no ha hecho más que empezar y tendremos cotilleos sobre la ‘primera dama’ gala para rato.
