La Comisión Europea ha comunicado hoy que autoriza la venta de las actividades bancarias de la CAM al Banco Sabadell, que contará con un generoso esquema de protección de activos, ya que considera que se ajusta a las normas de la UE sobre ayudas públicas.
Bruselas ha garantizado que el plan de reestructuración al que se condiciona la ayuda incluye no sólo la desaparición de la CAM como entidad independiente sino también una “reducción significativa” de su presencia tanto en sus mercados principales (Comunidad valenciana, Murcia y Baleares), como en el resto de España.
“La desaparición del Banco CAM como entidad independiente, la venta de su actividad bancaria al Banco Sabadell y la profunda reestructuración prevista garantizarán la viabilidad a largo plazo sin necesidad de un apoyo público continuado, evitando así distorsiones indebidas de la competencia”, ha señalado Bruselas en un comunicado.
Ayer, el director general de Banco Sabadell, Miguel Montes, señaló que la reestructuración de la entidad por la integración afectará a 2.200 empleados de la plantilla global del grupo (un 13% del total de 17.000) y exigirá cerrar 400 oficinas en una red de 2.200. De los 2.200 trabajadores que deberán abandonar la entidad, unos 900 serán empleados de la red de oficinas.
El visto bueno a las ayudas se ha hecho esperar más de lo previsto, debido a que es la primera vez que la ayuda se ha realizado a través de un esquema de protección de activos (EPA). No obstante, las negociaciones con Bruselas ya fueron espinosas en el caso de Cajasur, adjudicada a BBK, y muchos tiemblan al pensar cuánto se podrán alargar los plazos en el caso de Bankia, una entidad sistémica que requiere unas ayudas públicas prácticamente sin precedentes en España.
