Caso Nóos

La infanta Cristina niega haber vendido 13 fincas como sostiene un informe de Hacienda

Infanta Cristina

Un portavoz de la infanta Cristina ha negado el contenido de un informe entregado por Hacienda al juez José Castro, que instruye el ‘caso Nóos’, en el que se asegura que la hija del Rey obtuvo unos ingresos de 1,43 millones de euros tras vender 13 propiedades inmobiliarias, entre los años 2005 y 2006.

Cristina de Borbón afirma, a través de su representante autorizado, que «la información es del todo falsa y carece de base». Según las informaciones de la Agencia Tributaria, la esposa de Iñaki Urdangarín habría vendido pisos y terrenos en toda España, desde una casa de 315 metros cuadrados en la localidad barcelonesa de Calella, por la que habría obtenido 450.000 euros, a los 843 euros cobrados por otra venta en el Cerro de la Cruz, de Valenzuela de Calatrava, en la provincia de Ciudad Real.

Las operaciones se habrían realizado, aproximadamente, en el mismo periodo de tiempo en que la Infanta y su marido adquirieron y remodelaron el palacete de Pedralbes con un gasto total de unos 5,8 millones de euros, y estarían recogidas en la ‘biografía inmobiliaria’ de Cristina de Borbón procedente de los registros de la propiedad y el catastro.

Hacienda recopiló los datos tras haber recibido la orden del juez Castro de realizar un análisis tributario detallado de los bienes, las cuentas, el patrimonio y los activos de la Infanta entre los años 2002 y 2012.

Algunas de las operaciones inmobiliarias detalladas por el informe han sido negadas taxativamente por los supuestos compradores que, además, aseguran no haber tenido tratos en ningún caso ni con Urdagarín, ni con la Infanta. Incluso habría algunas fincas, supuestamente vendidas por la hija del Rey, que sus actuales propietarios aseguran poseer como resultado de una herencia.

El informe encargado por el juez Castro forma parte de la investigación que realiza sobre Cristina de Borbón por su posible cooperación en los presuntos delitos fiscales de su esposo junto a quien posee la sociedad Aizoon. Una peculiar empresa que habría podido ser utilizada por Urdangarín para blanquear capitales.

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