Mariano Rajoy quiere sofocar el malestar que se ha desatado en el sector más conservador del PP tras su decisión de retrasar sin fecha la reforma de la Ley del aborto. Para ello, el presidente del Gobierno ha recurrido al Constitucional. En concreto, a la mayoría con la que cuentan los populares en este tribunal desde hace apenas un mes. Este ‘poder’ le servirá al jefe del Ejecutivo para sacar adelante su recurso contra esta norma y poder cumplir así su compromiso electoral de derogar la ley.
En las últimas horas se ha desatado un auténtico motín en las filas del PP por el ‘archivo’ de la reforma del aborto, en especial, desde el ala más radical del partido. A las críticas internas que varios dirigentes han mostrado al respecto se han unido colectivos tradicionalmente cercanos a Génova como los antiabortistas.
Derecho a Vivir, por ejemplo, ha publicado un sondeo en el que advierte a Rajoy el 45,7% de los votantes del PP retirarán su apoyo a los populares en las próximas elecciones si persiste en esta actitud sobre la protección del derecho a la vida.
Ante esto, el presidente del Gobierno se ha puesto manos a la obra y ha recurrido al tribunal tiene en su mano el futuro de la Ley del aborto de José Luis Rodríguez Zapatero. Casualmente, el mes pasado se renovó parte de la plantilla del Constitucional y de los 12 magistrados que lo integran, siete fueron propuestos por el PP, otorgando así mayoría a los conservadores.
Precisamente, esta mayoría absoluta es la que está esgrimiendo Mariano Rajoy para tratar de llamar a la calma a este sector del partido indignado con el nuevo retraso. Y es que, el jefe del Ejecutivo está trasladando a los suyos el mensaje de que es mejor que este tribunal resuelva el recurso y después sea el Gobierno el que reforma la ley. Una estrategia con la que el PP dejaría el ‘trabajo sucio’ para el Constitucional y se limitaría a ‘vender’ que así lo ha querido el Constitucional.
No hay que olvidar que el ponente es el juez Andrés Ollero, exdiputado del PP y, según algunos medios, antiabortista, por lo que Moncloa espera que resuelva a favor del recurso de Génova.
Una solución a esta polémica que puede estar más cercana de lo que se piensa. El propio Ollero, según EFE, ha asegurado hoy que si el Gobierno no aprueba esta reforma, será el alto tribunal el que decida al respecto.
