Caso Bárcenas

El fin de las vacaciones de Ruz añade más presión al PP en el ‘caso Bárcenas’

Pablo Ruz, juez de la Audiencia Nacional

El juez vuelve este lunes al trabajo con la polémica por los discos duros de los ordenadores de Bárcenas destruidos y con la vista puesta en su cita con las secretarias de los extesoreros del PP.

El juez Pablo Ruz vuelve este lunes a ponerse al mando del ‘caso Bárcenas’. Y lo hace con varios temas sobre su mesa. Por un lado, deberá posicionarse ante la polémica por los ordenadores que el PP ha entregado a la Audiencia y cuyos discos duros están destruidos. Por otro, continuará con su instrucción y el martes tomará declaración a las secretarias de los extesoreros del partido. Unas acciones que amenazan con desatar una nueva crisis en Génova.

La dirección nacional del PP mira con bastante recelo, incluso temor, el regreso de Ruz a su despacho en la Audiencia Nacional. Y es que, retorno al trabajo coincide, nada menos, con la ‘vuelta al cole’ de los diputados con la celebración de las habituales sesiones de control al Gobierno.

Unos plenos que aprovechará la oposición para poner contra las cuerdas a un Rajoy que ha sorteado en todos momentos dar nuevas explicaciones sobre las constantes revelaciones en torno a los ‘papeles’ de Luis Bárcenas.

Por si la coincidencia con el regreso de la actividad en el Congreso y el Senado no fuera bastante, Génova verá cómo el magistrado tomará declaración a dos empleados del PP por la presunta financiación irregular del partido.

En concreto, el martes deberán pasar por la Audiencia las dos secretarias de Bárcenas y de Álvaro Lapuerta, Rosa María López Merinero y Estrella Domínguez López, y los tres auditores internos del PP. Todos estos deberán explicar su relación con la contabilidad del partido, así como si conocían alguna de las prácticas que se aseguran en los manuscritos del que fuera senador por Cantabria.

Asimismo, Ruz deberá decir algo por la sorprendente decisión de los populares de entregar a la Audiencia, tal y como solicitó el juez, los dos portátiles que usaba Bárcenas para trabajar en Génova. Unos ordenadores cuyos discos duros han sido destruidos, haciendo casi imposible conocer los documentos que en ellos guardaba el extesorero.

Aquí no termina la cosa. El magistrado también tendrá que estudiar si llama o no a declarar a Lapuerta al que aún no ha escuchado en los juzgados por su delicado estado de salud. Ahora, tras su regreso de vacaciones, éste ha mejorado de tal manera que ya sale a la calle para asistir a misa, por lo que podría perfectamente comparecer y aclarar qué sabe de la presunta financiación irregular del PP.

Todos los temas que Ruz tiene sobre su mesa pueden poder de nuevo en jaque a Mariano Rajoy, María Dolores de Cospedal y el resto de la cúpula popular hasta tal punto de provocar una auténtica crisis en Génova. Y es que, según pasan las semanas la estrategia de tratar de ‘dejar morir’ este caso está fracasando. Todo lo contrario, los ‘papeles’ de Bárcenas crecen y crecen hasta el día en el que le puede estallar en las manos al PP.

Y si todavía hay quién cree que aún la cosa no puede empeorar, hay que recordar que Ruz también lleva el ‘caso Gürtel’ y el próximo lunes día 16 tomará declaración a varios imputados. Entre ellos, a Teresa Gabarra, esposa del exconsejero de la Comunidad de Madrid Alberto López Viejo; al exdiputado de la Asamblea regional Benjamín Martín Vasco; al exalcalde de Arganda del Rey Ginés López; o al presidente de Martinsa, Fernando Martín Álvarez.

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