La líder de los populares de Euskadi trata de cerrar la crisis interna desatada por su decisión de apartar de forma inminente a Iñaki Oyarzábal de la Secretaría General del partido. Arantza Quiroga quiere afrontar con tranquilidad, y sin el menor problema, el Congreso del PP vasco que el 7 de marzo la reelegirá como presidenta del partido. Pero para ello, la líder de los populares de Euskadi tendrá que sofocar un importante ‘fuego’: la crisis interna que se ha desatado por su decisión de sustituir a Iñaki Oyarzábal como secretario general de la formación. Un relevo que ha rechazado Alfonso Alonso, presidente del PP alavés y portavoz en el Congreso, con el que Quiroga se ha propuesto llegar a un acuerdo en los próximos días que evite que el partido vuelva a mostrar una imagen de división.
Quiroga lo tiene claro: los años en los que el PP del País Vasco se sumía en una guerra interna entre afines de Antonio Basagoiti y seguidores de María San Gil han pasado a mejor vida. Ahora, los populares quieren centrarse en hacer política y dejar a un lado las luchas de poder en sus filas. De ahí que se haya propuesto solucionar el principal y, único, conflicto que existe en el PP de Euskadi. Un problema que se centra en qué pasará con Oyarzábal.
La presidenta del partido en el País Vasco ha perdido la confianza que en él tenía puesta y quiere sustituirlo al frente de la Secretaría General. No obstante, los planes de Quiroga se han encontrado con la firme oposición, entre otros, de Alfonso Alonso, ya que el portavoz del PP en el Congreso y responsable de los populares alaveses es un firme defensor de Oyarzábal.
Este choque amenaza con dinamitar al PP vasco en el cónclave que celebrará en apenas una semana, el próximo 7 de marzo, para reelegir a Quiroga como presidenta del partido por un nuevo mandato. Para evitar esto, esta última ha decidido tender la mano a Alonso y buscar un acuerdo que ayude a calmar las aguas.
Una solución que pasaría, según fuentes del partido, por acordar una salida digna para Oyarzábal que pasaría por continuar con sus responsabilidades en Génova como secretario general de Justicia del PP. Este puesto le ha otorgado una destacable repercusión nacional. No hay más que recordar las entrevistas que el aún ‘número dos’ de los populares vascos ha tenido con asociaciones de víctimas del terrorismo en el momento más delicado en la relación de estas últimas con el Gobierno.
Quiroga le expondrá esta solución a Alonso en una reunión que tendrá lugar en las próximas horas, mañana a muy tardar, en la que también estarán, según estas fuentes, el resto de responsables del PP vasco. La cita no se ha producido antes debido a la presencia en Madrid del portavoz popular en el Congreso con motivo del Debate sobre el Estado de la Nación.
En este encuentro, Quiroga espera poder cerrar de una vez por todas la crisis abierta en el PP del País Vasco que ha amenazado con fracturar de nuevo a un partido que, en esta comunidad, no pasa por su mejor momento electoral.
