“La prioridad para la empresa debe de ser la seguridad de sus empleados”, señala la sección sindical de CCOO en CatalunyaCaixa en una circular. La ofensiva de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) contra CatalunyaCaixa obligó a la dirección de la entidad a reunirse con los sindicatos, que han exigido a la entidad que tome cartas en el asunto para garantizar la seguridad de sus empleados ante la ocupación de algunas de las oficinas.
CCOO denuncia que en los últimos meses las oficinas de la entidad catalana están sufriendo “un inaceptable acoso por parte de diversas plataformas que juntas o por separado han puesto a nuestra empresa en su punto de mira preferido”. En una circular, el sindicato, que recuerda que la responsabilidad de la crisis no deberían pagarla los empleados, considera que es “evidente es que estos acosos han desbordado todas las expectativas”, y que “los protocolos diseñados por la empresa para hacer frente a la situación han quedado cortos”.
“La prioridad para la empresa debe de ser la seguridad de sus empleados”, señala el sindicato, que por ello, ha pedido que se elabore “un nuevo protocolo que garantice la salud física y psíquica de todos los empleados que están sufriendo esta situación”. Entre las propuestas de CCOO se incluye la posibilidad de cerrar la oficina el tiempo que sea necesario, “incluso días”, si “los acosos” son diarios o regulares y “ponen en riesgo la seguridad de los empleados, o bien porque el ruido y/o la situación son inaguantables”.
También pide reforzar los equipos de seguridad que permitan la salida de los empleados si se cierra el centro, o en caso de permanecer el centro abierto “que tengan un efecto disuasorio sobre estas plataformas”. Otra propuesta sobre la mesa es que se otorgue autorización genérica “por escrito” para poder abandonar el puesto de trabajo de forma temporal para reducir los efectos de los ruidos o cualquier otro método de presión que utilicen los activistas.
Asimismo, si el tema debe derivarse a la vía judicial, los empleados de estos centros “no deben participar de ninguna manera en los trámites jurídicos”, cree CCOO, que pide a CatalunyaCaixa “mano izquierda” para hacer entender a estas plataformas que los empleados “poco o ningún margen tenemos sobre las decisiones que toman los directivos”.
Por su parte, el sindicato CSICA-ATB puso especial énfasis en la necesidad de homogeneizar los criterios de actuación (adicionales a los protocolos de seguridad) en las diferentes zonas de la red, después de que se haya puesto de relieve que no ha existido ni el mismo “respaldo” ni la misma “velocidad de reacción” por parte de las diferentes direcciones
El sindicato considera que estas situaciones “ponen de relieve una gran insensibilidad humana y una demostrada incapacidad para gestionar equipos humanos por parte de ciertas direcciones de zona”. El tema es lo “suficientemente grave e importante” como para esperar y desear que la empresa actuará en consecuencia y que nuestras advertencias no caerán en “saco roto”, señala CSICA-ATB.
