El banco lanzó a principios de año la Hipoteca Santander, con la que abrió la veda del sector financiero por este segmento de negocio. El consejero delegado de Banco Santander, Javier Marín, ha aprovechado su intervención hoy en el XXI Encuentro del Sector Financiero organizado por Deloitte y ABC para apuntar que en los tres primeros meses del año la producción de nuevo crédito hipotecario de la entidad ha crecido un 65%, si bien el stock de crédito aún se está reduciendo.
Sí está creciendo ya en saldos puntuales el crédito concedido a empresas, una tendencia que se irá agudizando a lo largo del año, según las estimaciones de Marín, que considera además que el Santander está preparado en España para dar un salto de rentabilidad.
El consejero delegado del Santander cree que el banco en España «ya ha tocado fondo» y se encuentra «en un punto de inflexión», «muy bien posicionado para mejorar su rentabilidad», basándose en diversas variables: una posición de liderazgo, un sólido balance, una transformación comercial que ha elevado la eficiencia de la entidad tras la integración de Banesto y Banif, y unas menores provisiones por la crisis.
Marín considera que estas palancas de crecimiento permitirán al Santander obtener para el año 2016 unos beneficios en España de 3.000 millones de euros, frente al año 2013, en el que el banco «apenas ganó dinero».
Banco Santander aprovechó el inicio de 2014 para lanzar al mercado la nueva Hipoteca Santander, un préstamo para la adquisición de vivienda a un tipo de interés de Euríbor más 1,99% (2,95% el primer año) a un plazo máximo de 30 años.
La nueva oferta vino acompañada de una campaña comercial en los medios de comunicación en el que la entidad señalaba que “este año, por fin, pueden empezar a cambiar las cosas. El año en el que por fin puedas empezar una nueva etapa».
