Los académicos parecen dispuestos a rendirse ante la potencia de Megan Ellison y su flamante productora, Annapurna Pictures. A sus 26 años, la hija del presidente de Oracle Larry Ellison, está a punto de coronarse en la próxima gala de los ‘oscars’ gracias a ‘Zero Dark Thirty’, la película que cuenta la ‘caza’ de Ben Laden, que Megan le ‘ha pagado’ a Kathryn Bigelow.
Según las nominaciones de los Globos de Oro, hechas públicas ayer ‘Zero’ tendrá que vérselas sobre todo con Lincoln, dirigida por Steven Spielberg y , evidentemente la apuesta de Dreamworks para barrer en los ‘oscars’ y con ‘Les Miserables’ musical de lujo en el que la productora británica ‘Working Title’ ha tirado la casa por la ventana.
Pero la ‘peli’ de Megan va de favorita, en principio. Nada es seguro al 100% en el Hollywood de hoy, porque la industria en plena lucha por su supervivencia sólo produce macropelículas multipantalla de gran presupuesto, con intención de que suban las ventas de palomitas gracias a ese 3D que no acaba de despegar.
Sin embargo, precisamente por eso, Annapurna Pictures, gana enteros, porque la hija de Ellison financia proyectos de ‘calidad’ a directores de ‘calidad’ que no encuentran financiación para sus ideas en los grandes y adocenados estudios.
Esa supuesta ‘frescura’ puede servirle a ‘Zero’, un filme de acción convencional, según algunos críticos disidentes, para alzarse con la victoria, frente a un Spielberg ya oscarizado y que representa ahora al poder establecido. Aunque también hay espacio para la sorpresa.
Un carril que, en este caso, correspondería a Quentin Tarantino que compite con ‘Django Unchained’. Una película producida por A Band Apart, la empresa del propio director que cuenta con el apoyo financiero de The Weinstein Company, o lo que es lo mismo de la Oficina de Inversiones de Qatar.
