Las acciones de Liberbank acumulan una caída de más de un 25% desde los máximos de 0,799 euros que alcanzó hace sólo cuatro meses. “Bochornoso, escandaloso, humillante, esperpéntico, vergonzoso, bananero…”; CSICA tira de una amplia ristra de adjetivos para calificar el desempeño de la dirección de Liberbank, a la que acusa de estar detrás de las fuertes caídas que acumulan las acciones del banco en lo que va de año.
Las acciones de Liberbank se situaban ayer a pocos minutos del cierre en 0,58 euros, lo que representa una caída acumulada de casi un 15% respecto a los 0,676 euros a los que cerró el año 2014 y de un 27% respecto a los máximos de 0,799 euros alcanzados en mayo de este mismo año.
Esta brusca caída en los últimos cuatro meses no ha pasado desapercibida para CSICA, que señala que “supone un varapalo en toda regla, no solo para los antiguos tenedores de híbridos”, a los que se les canjearon sus títulos por acciones, “sino muy especialmente para todos aquellos que han acudido como moscas a la miel en busca del ansiado pelotazo, tras la desaparición de Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria”.
Para el sindicato con más representación en Liberbank, los culpables de esta caída bursátil tienen nombres y apellidos. Así, en una circular destaca que resulta “esperpéntico” que el banco esté “continua y permanentemente en las portadas de los medios económicos con noticias absolutamente negativas y escandalosas, las cuales dañan constantemente su imagen”. En la misma línea, denuncia los “errores de bulto” que se cometen de modo constante por la alta dirección del banco, dentro de los cuales cita el paso de Manuel Menéndez de presidente a consejero delegado, “rodeado a capricho de un nutrido elenco de consejeros áulicos”.
CSICA recuerda también que Liberbank tiene el “deshonor” de ser la entidad que soportó el mayor importe económico por costas judiciales de España en 2014 (cláusulas suelo, híbridos, etc.) fruto de su “extrema judicialización sin parangón entre las entidades financieras españolas”. En esa línea, recuerda que el banco tiene prácticamente rotas las negociaciones con los sindicatos y esté “desacreditado” frente a las distintas Inspecciones de Trabajo de España y las multas que ha recibido por la venta de preferentes a sus clientes.
“Con todos estos antecedentes, y otros muchos que nos dejamos en el tintero, no es de extrañar que los mercados estén castigando fuertemente a las acciones de Liberbank, lo que constituye una clara reprobación de la gestión de su dirección, a la que se suma CSICA”, concluye el sindicato.
