Caja Castilla-La Mancha (CCM) celebra esta tarde su asamblea general en sesión ordinaria y extraordinaria para votar la segregación del negocio bancario de la entidad castellano-manchega a favor de Banco Liberta, propiedad de Cajastur.
De este modo concluye un proceso iniciado en marzo del 2009, cuando la entidad castellano-manchega tuvo que ser intervenida por el Banco de España, que nombró a tres administradores, con el ya citado traspaso del negocio bancario de CCM al Banco Liberta, bajo el nombre de Banco CCM, fórmula que permite a la entidad castellano-manchega mantener su sede social en Cuenca.
El punto del orden del día en que se votará la integración requiere dos tercios de votos positivos de los 75 consejeros necesarios para que se forme la asamblea. Por ello, es necesario que 50 de esos 75 integrantes voten a favor para que esta operación salga adelante.
Tanto el PSOE como el Gobierno regional y los sindicatos ya se han manifestado a favor de esta unión, por lo que se espera su voto favorable. Los consejeros afines al Partido Popular consideran “imprescindible” la inclusión de un nuevo punto en el orden del día, con el fin de adoptar un nuevo acuerdo que aporte garantía al mantenimiento de los puestos de trabajo.
