Economía

Los responsables de las cajas quieren aumentar y consolidar sus retribuciones

La profesionalización de los órganos de gobierno de las cajas de ahorros que promulga el ‘Plan de reforzamiento del sector financiero’, aprobado el pasado viernes, se ha convertido en la excusa perfecta para que los responsables de las cajas cambien las habituales dietas que cobraban por acudir a cada reunión del consejo de administración por sueldo fijos. En algunos casos, incluso, la intención es que ambas retribuciones se sumen.

Si bien el espíritu de la ley responde a una despolitización de las entidades para buscar a unos gestores profesionales, lo cierto es que por el momento las cajas hacen oídos sordos. Un ejemplo es el Banco Financiero y de Ahorros (BFA). Los estatutos del SIP que lideran Caja Madrid y Bancaja señalan que “la retribución de los consejeros consistirá en una cantidad periódica determinada y en dietas por la asistencia a las reuniones del consejo de administración y de sus comisiones, sin perjuicio del reembolso de los gastos correspondientes”. El BFA cuenta con 22 consejeros, 11 de ellos propuestos por Caja Madrid. Hasta el momento, los consejeros de las diferentes cajas sólo percibían dietas, aunque en algunos casos podían a llegar a ser cuantiosas. Sólo Caja Madrid pagó el año pasado 1,8 millones de euros en concepto de dietas a sus 22 consejeros, lo que otorga una retribución de unos 81.800 euros para cada uno de ellos.

El caso del nuevo banco que preside Rodrigo Rato no es una excepción, sino la tónica general en todos los Sistemas Institucionales de Protección (SIP) que se han creado en el proceso de reestructuración. Así, Banco Mare Nostrum, el proceso que aglutina a Caja Murcia, Caja Granada, Sa Nostra y Caixa Penedés también incluye en sus estatutos la figura del sueldo para los miembros del consejo. No obstante, ni los consejeros ejecutivos de BFA ni los de Mare Nostrum tendrán derecho a percibir remuneración alguna en concepto de dietas por su pertenencia a algún órgano de gobierno de las cajas o de las entidades de crédito accionistas de los SIP, para evitar duplicidad en las retribuciones.

En los casos de las cajas que eviten convertirse en bancos y mantengan su andadura con su actual forma jurídica, también se sustituirán las habituales dietas por sueldos fijos, aunque para ello es necesario modificar las actuales leyes autonómicas. En el País Vasco, el nuevo proyecto de ley, que negocian PNV, PP y PSE, incluirá la posibilidad de que la labor de los vocales de los consejos de administración y de las comisiones de control de la BBK, la Kutxa y la Vital pueda ser retribuida. El texto incluirá además que la retribución sea incompatible con cualquier otra actividad pagada. Estos sueldos deberán ser fijados por las asambleas de las respectivas cajas. Otra autonomía que en breve modificará su ley de cajas será Canarias, que también incluirá cláusulas para aumentar la profesionalización de los consejos.

Si se contabilizan las 17 cajas que sobreviven de las 45 que había hace algo más de un año, existen actualmente 320 consejeros en sus órganos de gobierno.

Los bufetes internacionales se despliegan en España para asesorar a las cajas
El nuevo ‘Plan de reforzamiento del sector financiero’ aprobado la semana pasada por el Gobierno ha dado un plazo máximo de un año a las cajas de ahorros para que salgan a Bolsa si no quieren ser nacionalizadas. Lo que para las entidades supone una carrera contrarreloj, para los bufetes de abogados y los bancos de inversión internacionales se ha convertido en una oportunidad de negocio que no van a dejar escapar.

Según publica Bloomberg, que cita una estimación de Bieger en Clifford Chance, hay cerca de 200 abogados en España capacitados para asumir el trabajo que se avecina de asesoramiento a las cajas. “Cada salida a Bolsa requiere un equipo legal independiente para el vendedor y el banco de inversión, lo que significa que hay un riesgo de que los recursos deban estirarse”, tal y como considera esta firma, que en la última década ha sido el tercer mayor asesor jurídico en materia de concentraciones en España. Por ello, no pocos bufetes tienen previsto incrementar su plantilla en el país. Es el caso de Roland Berger Strategy Consultants, que proporciona asesoramiento sobre la gestión, y que pretende aumentar su equipo en Madrid a cerca de 55 personas, desde las 40 con las que cuenta en la actualidad, para controlar el trabajo de consultoría que espera de las cajas en busca de capital. “Va a haber un montón de actividad que se iniciará inmediatamente”, según Ricardo Wehrhahn, socio de la firma, en una entrevista telefónica concedida a Bloomberg.

Bancos
Mientras, los bancos de inversión ya están trabajando junto a las cajas para preparar sus salidas a Bolsa. Es el caso de la japonesa Nomura Holdings, que ya asesoró a la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) en su integración con Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria. También asesoró a Cajamurcia en su SIP. Banca Cívica, por su parte, ha designado al suizo Credit Suisse como coordinador global único de su salida a Bolsa, según anunció ayer el grupo integrado por Cajasol, Caja Navarra, CajaCanarias y Caja de Burgos. Entre sus funciones destacan la coordinación de los bancos colocadores de acciones de Banca Cívica, así como la organización de los ‘roadshows’. Las cajas de ahorros podrían necesitar capital por valor de 20.000 millones de euros, según las estimaciones del Banco de España. El año pasado, todos los debuts bursátiles que se realizaron en España estuvieron valorados en su conjunto en 13.000 millones.

En este escenario, el director del Centro de Sector Financiero de PwC e IE Business School, Luis de Guindos, ha pronosticado hoy una segunda ronda de consolidación de cajas antes del próximo 10 de marzo, fecha en la que el Banco de España dará a conocer las eventuales necesidades de capital de las entidades caso por caso. De Guindos considera que algunos de los 17 grupos de cajas existentes en España optarán por unirse a otras entidades para cumplir con las nuevas exigencias de capital establecidas por el decreto ley. De momento, tal y como ya publicó EL BOLETÍN, los rumores del mercado apuntan sobre todo en dos direcciones, una eventual fusión entre Unicaja y la entidad surgida de la fusión de Caja Duero y Caja España, y una integración entre Novacaixagalicia y el Banco Pastor, en un proceso en el que podría unirse también el portugués Espirito Santo.

Más información