Economía

Los trabajadores de Clesa se reunirán con el juez que lleva el concurso el próximo lunes

Los representantes de los trabajadores de Clesa, empresa de los Ruiz-Mateos, se reunirán el próximo lunes con el juez que tramita el concurso voluntario de acreedores de la firma lechera. Así lo ha asegurado Luis Muñoz, portavoz del comité de empresa de la firma, a EL BOLETÍN, que ha comentado que aprovecharán este encuentro para solicitar una explicación sobre la situación actual del expediente concursal de Clesa.

La reunión con el juez se ha concretado hoy durante la concentración que ha llevado a cabo parte de la plantilla de Clesa, junto con la de Helados Royne, también propiedad de la familia jerezana, ante el juzgado de lo mercantil número 6 de Madrid durante una hora y media.

En concreto, 75 trabajadores han solicitado al juez, por medio de pancartas, que “agilice el proceso” porque las 700 familias afectadas por la situación de estas empresas están “pasando hambre”. El “calvario” de los trabajadores, que no se puede sostener más, ha hecho que algunos pierdan su vivienda por no poder pagar el alquiler, y que otros se hayan visto forzados a acudir a sus familiares para poder comer.

El representante de los trabajadores de Clesa también ha reconocido no entender cómo es posible que la firma láctea, una de las primeras en solicitar la antigua suspensión de pagos, todavía no haya entrado en situación concursal.

Los Ruiz-Mateos solicitaron el concurso voluntario de acreedores el pasado 18 de marzo en los juzgados de Pontevedra y dos meses después, tras volver a Madrid, donde se encuentra la sede social de la empresa, y tras varios requerimientos de información por parte del juez, todavía no hay una decisión tomada al respecto.

La petición unánime de los trabajadores, que trasladarán al juez el próximo lunes, es que se agilice el proceso y que se aparte a los Ruiz-Mateos de la gestión de ambas compañías, ya que creen que es lo único que les permitirá ver el final de este “túnel sin salida” en el que se encuentran.

Por su parte, según ha informado la Federación Agroalimentaria de CCOO en un comunicado, el representante de la plantilla de Helados Royne, Casimiro Rodríguez, ha reconocido que la firma funciona al 10% gracias al trasvase de materia prima realizado por Clesa para la elaboración de helados. Aunque ha recordado que se ha perdido el 70% de la campaña, ya que deben a sus proveedores todas las partidas correspondientes a 2010.

Rodríguez también ha abogado por que el juez declare el concurso cuanto antes ya que, en su opinión, este proceso permitiría a la empresa salir “a flote”, ya que son varias las compañías que se han mostrado partidarias a comprarla.

Por otro lado, los Ruiz-Mateos han solicitado hoy el concurso voluntario de acreedores para los siete hoteles que poseen en las Islas Baleares, de los que seis están en Palma de Mallorca y otro en Menorca. Con esta decisión, ya son 22 el número de empresas en suspensión de pagos del ‘imperio’ de la familia jerezana.

Estos hoteles que han solicitado el concurso de acreedores engloban su negocio bajo la firma Hotasa, que puso a la venta los 15 inmuebles que poseen los Ruiz-Mateos en España hace tres meses, tras solicitar el preconcurso de acreedores para los mismos. De ellos, ocho se han quedado fuera de la antigua suspensión de pagos, los ubicados en Andalucía y Canarias, aunque según Europa Press, la familia no descarta que sigan la misma suerte que sus homólogos de Baleares.

La división hotelera de la familia jerezana acumula una deuda de más de 200 millones de euros, la mayoría por créditos hipotecarios, lo que supone un tercio de la deuda total de sus empresas, de 700 millones, reconocida por los Ruiz-Mateos.

Además, la decisión de la familia se ha producido pocos días después de que los trabajadores de los hoteles de Baleares reclamaran la entrada en concurso de estas empresas, ya que según la plantilla era la única forma de que se hiciese efectiva la venta.

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