Banesto cerró la primera mitad del año con un beneficio de 287 millones de euros. Estos resultados, que suponen un descenso del 24,9% respecto al año anterior, se logran en un «entorno difícil, donde persisten la debilidad económica y las tensiones en los mercados», según ha anunciado la entidad.
El conjunto de dotaciones y saneamientos realizados ascendió a 343 millones de euros. Las dotaciones para insolvencias alcanzaron los 266,0 millones de euros, frente a los 184,8 millones en el primer semestre de 2010.
La tasa de morosidad aumentó hasta el 4,39%, frente al 4,15% de marzo, aunque sigue por debajo de la media.
