Economía

Castellano se juega el futuro de Novagalicia en las próximas dos semanas

El destino de Novagalicia Banco podría quedar sellado en las próximas dos semanas si su presidente, José María Castellano, no logra convencer a inversores privados para que compren al Banco de España una parte significativa de las acciones que controla en la entidad gallega.

El 15 de marzo se abrirá la segunda ventana para que Novacaixagalicia, que controla poco más de un 10% del banco, encuentre nuevos inversores privados interesados en recomprarle a la institución que dirige Miguel Ángel Fernández Ordóñez su participación, que asciende al 90,7% del capital del banco tras haberle inyectado más de 2.400 millones de euros.

En la primera ventana que abrió el Banco de España, en diciembre del año pasado, Castellano logró apenas la entrada de 70,4 millones de euros, que pusieron 17 empresarios de la comunidad para hacerse con el 2,59 % de su capital. La cifra se situó muy por debajo de los 500 millones prometidos inicialmente.

La prensa regional gallega publicaba hoy que algunos fondos británicos y estadounidenses habrían mostrado su interés en participar en la segunda ventana, aunque para ello habrían exigido la creación de un esquema de protección de activos (EPA) similar al que recibió el Sabadell para hacerse con la CAM, aunque este instrumento sólo se ha utilizado hasta el momento en entidades intervenidas.

Fuentes de la entidad consultadas por EL BOLETÍN han declinado hacer ningún comentario sobre las negociaciones que Castellano lleva a cabo para la entrada de inversores privados en el banco gallego.

La entrada de inversores privados que eviten que Novagalicia siga los pasos de la CAM y Unnim y sea subastada a corto plazo no es el único quebradero de cabeza al que se enfrenta Castellano. En su punto de mira, también, el 31 de marzo. Ese día deberá comunicar al regulador cómo va a hacer frente a las nuevas provisiones a las que le obliga la ley de saneamientos de activos inmobiliarios impulsada por Luis De Guindos.

La entidad gallega necesita 2.340 millones de euros (1.600 millones de provisiones y 740 de capital) para sanear su ladrillo, según reconoció hace poco.

Más información