Las tres nacionalizadas pagarán a los trabajadores afectados por la última ronda de despidos unas indemnizaciones de 30 días por año, superiores a los 20 días de la reforma laboral. Semanas de duras negociaciones, con la amenaza de aplicar la reforma laboral a rajatabla por un lado, y jornadas de huelga, manifestaciones y otros tipos de protestas, por el otro, para que finalmente CatalunyaCaixa haya acordado con los sindicatos un ERE con unos términos que cumplen a la perfección con la línea roja marcada allá por el mes de febrero en las negociaciones de Bankia. Es decir, indemnizaciones de 30 días por año frente a los 20 inicialmente previstos.
Esta semana, CatalunyaCaixa llegó finalmente a un acuerdo in extremis con los sindicatos para acometer un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectará a 2.153 empleados. La entidad catalana ofrece finalmente en las bajas incentivadas indemnizaciones de 30 días por año con un máximo de 22 mensualidades.
Asimismo, se ofrece un plus de antigüedad de 700 euros por año entero. En el caso de que el empleado supere los 25 años en la entidad, el plus será de 3.000 euros por año entero que supere estos 25 años. También se contempla un plus de voluntariedad que irá de 12.500 euros 27.500 euros. El máximo a cobrar por el empleado no podrá superar los 235.000 euros cuando la antigüedad sea superior a 20 años ni los 190.000 euros por debajo de esos años.
La dirección de la entidad catalana había partido de una propuesta inicial para despedir a 2.395 trabajadores aplicando el mínimo legal contemplado por la reforma laboral del Gobierno de Rajoy, es decir, 20 días por año con un tope de 12 mensualidades.
CatalunyaCaixa no es la primera entidad rescatada que finalmente da su brazo a torcer. A principios de febrero, Bankia acordó con los sindicatos un recorte de 4.500 empleados. Las medidas de salida se concretaron en diversas modalidades de bajas incentivadas que se segmentaban en función de la voluntariedad, edades y la evolución del plan de recolocación. No obstante, la media se situó en 30 días por año trabajado, con el límite de 20 mensualidades.
La propuesta inicial de Bankia había sido de 4.900 despidos con indemnizaciones de 22 días por año y 14 mensualidades.
Apenas unos días después, Novagalicia acordó un ERE para 1.850 empleados de los cuales un máximo de 455 pueden acogerse a prejubilaciones cobrando el 80% de su sueldo. El resto del recorte de la plantilla se acometerá a través de bajas incentivadas, con unas indemnizaciones de 30 días por año, con un máximo de 22 mensualidades, más una prima de 2.000 euros por cada tres años de antigüedad. En ningún caso la indemnización podrá superar los 250.000 euros.
En un principio, la entidad había puesto como límite para el ERE indemnizaciones de 24 días por año y 18 mensualidades, pero finalmente dio su brazo a torcer.
Bankia, Novagalicia y CatalunyaCaixa son las tres entidades actualmente en manos del Estado, y también las que más ayudas públicas han recibido. En total, Bankia ha recibido 22.424 millones, por los 12.052 de la catalana y los 9.052 de la gallega.
