La intención de la Fiscalía Anticorrupción es de mantener su petición de 3,5 años para Ricard Pagès y de tres años para el resto de exdirectivos. Los cuatro exdirectivos de Caixa Penedès que están siendo juzgados por engrosar sus pensiones multimillonarias han intentando atenuar las penas que piden para ellos las acusaciones devolviendo los 28,6 millones de euros que presuntamente cobraron de forma irregular.
Durante la vista celebrada ayer el juez central de lo penal José María Vázquez Honrubia decidió suspender hasta hoy el juicio contra el exdirector general Ricard Pagès y los exdirectivos Santiago Abella, Joan Caellas y Manuel Troyano a petición de las partes, que hicieron esta solicitud para culminar sus conclusiones finales.
Según publica la agencia Efe, que cita fuentes jurídicas, los cuatro exbanqueros buscan un acuerdo con las acusaciones para tratar de aminorar las penas de cárcel que piden para ellos.
Así, tratarían de evitar el ingreso en prisión reconociendo los hechos y reparando el daño ocasionado, con lo que tendrían que devolver a la entidad los 28,6 millones que se llegaron a embolsar por sus jubilaciones.
No obstante, la intención de la Fiscalía Anticorrupción, que dio origen a este procedimiento, es de mantener su petición de 3,5 años para Pagès y de tres años para el resto de exdirectivos por un delito de administración desleal y otro de apropiación indebida.
