La fiebre del ‘vintage’ ha llegado a la Red que encuentra modelos en los usos y costumbres de su prehistoria. Así que más vale estar preparados para la epidemia de GIFs animados que va a inundar los muros de Facebook.
Sí, también el suyo ingenuo lector. No es una simple advertencia. El peligro de contagio ya es real en medio mundo. Se trata de fotos retocadas que corren en tiempo real por las arterias de la red de redes. Hay por ejemplo, una de Taylor Swift con los brazos en alto en los últimos grammys que no tardarán en ver…
Sí en la música han vuelto los vinilos, en los bares de copas las sillas y las mesas de fórmica y a las cocinas les espera el regreso inopinado del formato ‘forlady’ en los armarios…¿Cómo iba la red a quedarse al margen de todo esto? Por eso, como decíamos antes, vuelven los GIF animados. Y se van a quedar una temporada. Motivos, por lo menos, dicen que ahí.
Es ‘chic’, o ‘cool’ como dirían los fans de Russian Red. A los veinteañeros que aún permanecen en ‘Tuenti’ les recuerda su infancia y a los pioneros, los tiempos heroicos. Era 1987, aquel final de década en que la red se movía a dos imágenes por hora y empezaron a circular estos archivos diseñados por Compuserve.
Es artístico. En el último, Art Basel de Miami, los más avanzados videoartistas presentaron obras basadas en la movilidad de estos archivos de imágenes que arrasan también en redes sociales como Tmblr o Pinterest. Justo en las que toca estar ahora para diferenciarse de los paletos de los ‘smartphones’.
Es ‘trendy’. La blogeras más avezadas del mundo de la moda, optan por estas viñetitas animadas para dar rienda suelta a sus trapichuelos patrocinados por las marcas, en este mundo, donde todo…ya se sabe…surge por ‘marea’ o generación espontánea.
Y, sobre todo, es el formato que intentan imponer las agencias de publicidad, las verdaderas animadoras del cotarro internaútica. ¿No se lo creen? Echénle un vistazo a los últimos anuncios de Burberry, por ejemplo. En fin, cosas peores se han navegado. Por si acaso, y para prepararse habrá que darse una vuelta por gifsoup y gifninja y hacerse con un buen montón de postalistas. ¿O no?
