Internacional

T-Mobile y Orange, obligadas a unir sus fuerzas en Reino Unido para sobrevivir

Deutsche Telekom y France Telecom se han visto obligadas a unir sus fuerzas en el Reino Unido tras una crisis de consumo que ha golpeado duramente a sus filiales, especialmente a la de la compañía alemana. Ambos grupos han pedido a la Unión Europea que apruebe la fusión de sus operaciones móviles en el país y que reduzca el número de operadores en el mercado de cinco a cuatro.

El Ejecutivo comunitario ha abierto un plazo de diez días para que las terceras partes que se consideren afectadas por esta concentración planteen posibles observaciones. Esta operación supondrá importantes ahorros de costes para ambas compañías, al cerrar superficies y disminuir gastos de marketing, sobre todo en el contexto actual de crisis económica. Sin embargo, el resto de actores también se vería beneficiado.

Si se reduce el número de operadores, la presión en las tarifas se aliviaría a favor de un aumento de los márgenes de las compañías, señalan fuentes del sector a EL BOLETÍN.
El país es el ejemplo perfecto de mercado competitivo. Hay cinco operadores dominantes y más de diez supermercados y minoristas que no cuentan con red propia.

Como consecuencia de ello, los márgenes de Ebitda de las operadoras son mucho más bajos que en cualquier otra parte del continente. Actualmente, O2 (la filial de la española Telefónica) es el principal operador del mercado británico, con una cuota cercana del 30%. Vodafone posee un 24%, mientras que Orange cuenta con un 21%, T-Mobile un 15% y Whampoa un 8%.

Más información