Los directivos de la entidad germana han visto cómo en el pasado ejercicio sus ingresos se incrementaron hasta nueve veces con respecto al año anterior. Esta situación se debe a los ingresos que registró Deutsche Bank en 2009, después de un año -el 2008- marcado por pérdidas de hasta 3.900 millones de euros.
La paga conjunta del consejo fue de 38,98 millones de euros en 2009. El año anterior fue de tan sólo 4,48 millones de euros. Josef Ackermann, actual presidente del grupo, fue el mayor beneficiado de esta situación, ya que percibió 9,55 millones en total. Anshu Jai, director del área de mercados globales, percibió 7,79 millones de euros, mientras que Michael Cohrs recibió 3,22 millones de euros. Otros miembros del consejo, como Stefan Krause, han logrado ingresar cuatro millones de euros en 2009.
El presidente de Deutsche Bank, uno de los banqueros más criticados de Europa al controlar una de las entidades más potentes del continente, siempre ha defendido las compensaciones elevadas a los directivos de los bancos. En cualquier caso, la remuneración que percibe Ackermann no dista mucho de la de algunos directores de banca estadounidenses, como Lloyd Blankfein, de Goldman Sachs. Blankfein recibió en 2009 de la entidad 9,6 millones de dólares (siete millones de euros). Otros salarios de banqueros de EEUU superan esta cifra, e incluso la de Ackermann. Por su parte, el presidente de la energética germana RWE AG, Juergen Grossmann, ganó 9,2 millones de euros en 2009. La entidad alemana dio a conocer los sueldos de su consejo en su informe anual de cuentas.
