Goldman Sachs, el banco de inversión acusado de cometer fraude por el regulador bursátil de EEUU, la SEC, podría estar cambiando su forma de tratar a los clientes, según el diario Financial Times. El diario, en su edición digital, informó ayer por la noche que, según fuentes de la SEC y de Goldman, los empleados del banco estarían proporcionando una información mucho más detallada a sus clientes institucionales a la hora de ofrecer operaciones de inversión.
No obstante, los portavoces de Goldman Sachs consultados por EL BOLETÍN no han confirmado ni desmentido estas informaciones.
Goldman Sachs lleva una semana en el ojo del huracán. Y algo más siendo vigilado por la SEC, que acusó a la entidad de ofrecer productos a sus clientes para, posteriormente, y a través de la industria de los ‘hedge funds’, apostar contra ellos.
De esta manera, la entidad pudo capear la crisis financiera que arrasó Wall Street en 2008, fruto, entre otras cuestiones, de la crisis ocasionada por el mercado inmobiliario por las llamadas hipotecas ‘subprime’. Goldman siempre ha negado las acusaciones de fraude, alegando que daban la información necesaria a sus clientes.
