El sector financiero europeo volvía a ponerse hoy en cuestión con el triste protagonismo de la banca mediana italiana. Las acciones de banco Popolare di Milano, que estuvieron suspendidas de cotización durante la jornada, caían a pocos minutos del cierre un 4,45% ante la diferentes informaciones de la prensa transalpina de que podría aplazar la ampliación de capital que estaba prevista para septiembre.
El banco ha tenido que salir a la palestra para negar estas informaciones y señalar que el calendario de la ampliación, de 1.200 millones de euros, sigue adelante. La cuarta mayor entidad italiana ha negado también que exista una confrontación con el Banco de Italia sobre esta operación.
Banco Popolare, que intenta mejorar sus ratios de solvencia, también podría estar en negociaciones para desprenderse de algunos activos no estratégicos, como sus negocios en Hungría, según publica ‘Il Sole 24 Ore’.
