La minoría republicana del Senado de EEUU ha logrado bloquear la llamada «norma Buffett», apoyada por el presidente Barack Obama, y que tiene como objetivo fijar una subida de impuestos a las rentas más altas del país.
Debido a una maniobra parlamentaria de los republicanos, los demócratas, que controlan la Cámara Alta, no han logrado reunir los 60 votos mínimos necesarios, de un total de 100 asientos, para proceder al debate y votación de dicha normativa. La «norma Buffett» busca imponer una tasa tributaria del 30% a quienes perciben un ingreso anual de al menos dos millones de dólares y que paulatinamente se aplicaría a quienes ganan al menos un millón de dólares al año.
Según un estudio llevado a cabo recientemente por los analistas de la agencia Bloomberg, la «norma Buffett» podría aportar unos 47.000 millones de dólares (35.500 millones de euros) durante los próximos diez años a las arcas estatales.
Desde que se conoció esta medida, los republicanos la han tachado de populista, fieles a su costumbre de rechazar cualquier iniciativa que esté relacionada con un incremento de los impuestos. «Ha sido diseñada como un proyecto político. No hay racionalismo económico en esta norma», ha señalado en alguna ocasión Orrin Hatch, senador por Utah.
