La subasta de bonos alemanes a diez años que este miércoles se ha celebrado en Berlín ha cosechado el peor resultado de los últimos tiempos para el Bundesbank. Alemania no ha logrado encontrar dueño para un 28% de los 5.000 millones de euros que pensaba colocar a causa de un mercado reticente ante un posible golpe de timón del Banco Central Europeo.
La posibilidad de que la autoridad monetaria de la Eurozona anuncie mañana una intervención en el mercado secundario de deuda ha dejado sin cubrir un amplio rango de la llamada a los mercados de Berlín. La emisión de hoy tan solo ha logrado un ratio de cobertura de 1,1 veces sobre el importe finalmente colocado, de 3.610 millones de euros. En otras palabras, los inversores han solicitado de las arcas públicas germanas solo un 72% de lo que se había marcado como objetivo el banco central del país.
Los gestores de renta fija apuntan que los grandes jugadores de este mercado han preferido no acudir a la cita a la espera de cuáles son los movimientos por los que finalmente opta el BCE de Mario Draghi. Una intervención podría desdibujar al actual escenario de la deuda soberana, por lo que los inversores parecen haber optado por esperar, ver y diseñar entonces la estrategia más conveniente. En este sentido, los expertos destacan, que con rentabilidad negativa en la deuda alemana a corto plazo y con una inflación que no frena, muchos se plantean cuál debería ser el suelo mínimo para los papeles germanos. Más en la víspera de una cita tan determinante como la de mañana.
La única parte positiva de esta historia para las arcas de Berlín es que la rentabilidad se ha mantenido estable en el 1,42%, por lo que no ha sido tanto un problema de tipos como de falta de demanda, según los analistas. Sin embargo, este porcentaje ha quedado ligeramente por encima de lo que a la hora de la subasta marcaba el secundario.
Así, los diferenciales del ‘bund’ con los bonos senior periféricos se han estrechado en una sesión que prometía pocos movimientos. Incluso algunos parqués como el madrileño se han llegado a decantar con más decisión que a primera hora por las alzas.
