Según las últimas encuestas, el 62% de los alemanes quiere enviar ayuda económica a Ucrania mientras que el 65% de los franceses se muestra contrario a esta medida. Este fin de semana han tenido lugar en el marco de la Unión Europea dos encuestas para valorar cuánto apoyo recibe la opción de suministrar apoyo económico a Ucrania. En Alemania, el 62% de la ciudadanía apoyaría la medida. En Francia, sin embargo, sólo el 35% lo haría.
Los estudios, llevados a cabo por Infratest en Alemania y por Ifop en Francia, señalan la divergencia de opiniones existente en el Viejo Continente respecto a la crisis ucraniana. Mientras tanto, en Rusia sólo el 11% de la ciudadanía opina que las protestas de Kiev estuvieron motivadas por la corrupción política, según un estudio llevado a cabo por Levada. Así, el 43% de los rusos opina que lo sucedido en Ucrania es un golpe de Estado, mientras que el 23% califica la situación actual de guerra civil y un 16% de levantamiento popular.
Durante los últimos días, Rusia ha movilizado a sus tropas en la región autónoma de Crimea, que por el momento se encuentra dentro de Ucrania pero que aloja varias bases militares de Moscú. Vladimir Putin afirma estar actuando para proteger los intereses rusos en un lugar donde la mayoría de la población es, asimismo, rusa. El parlamento local ha convocado un referéndum el próximo 30 de marzo para decidir cuál es su futuro. Todos los indicios apuntan a que proclamará su ruptura total con Kiev.
Mientras tanto, Gazprom ha entrado también en el conflicto. El gigante ruso ha exigido a las nuevas autoridades ucranianas, llegadas al poder tras la expulsión violenta del rusófilo Víktor Yanukóvich, que paguen los 1.550 millones de dólares que Ucrania debe a la empresa en concepto de combustible. De lo contrario, asegura la gasista rusa, subirán de nuevo los precios del suministro. El 22% del gas que se consume en la Unión Europea procede de Rusia y la mayoría llega hasta el Viejo Continente a través de los gasoductos construidos en Ucrania durante la era soviética.
