El IPC de Alemania se situó en el 4,9% en enero, de acuerdo con los datos adelantados publicados hoy. Supone un retroceso de cuatro décimas respecto al 5,3% de diciembre, cuando registró la lectura más alta desde 1992, pero está muy por encima del 4,7% que había augurado el mercado teniendo en cuenta de la retirada de efectos de base como la subida del IVA.
En su tasa mensual, el IPC subió un 0,4%, frente al descenso del 0,2% que habían esperado los analistas.
La inflación armonizada se situó en tasa anual en el 5,1%, frente al 4,4% estimado, mientras que en tasa mensual subieron un 0,9%, cuando se había esperado que se mantuvieran estables.
“La tasa de inflación sigue siendo elevada a pesar de la ausencia de los efectos de base provocados en 2021 por la reducción temporal de los tipos del impuesto sobre el valor añadido y la fuerte caída de los precios de los productos petrolíferos en 2020”, dijo Destatis.