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Para variar hoy vamos a empezar con una noticia positiva con

Para variar hoy vamos a empezar con una noticia positiva con la que abren sus ediciones tanto El País como El Mundo, que dedican el espacio principal de sus portadas al hecho de que PSOE y PP hayan pactado una reforma de la ley electoral “que la endurece mucho”, según hace notar el de Prisa, “hasta el punto de que contempla una fórmula para echar de los ayuntamientos a los concejales que se nieguen a condenar la violencia”, lo que dificulta que Batasuna pueda presentarse de alguna manera las elecciones.

Es precisamente ese aspecto, el cerrar el paso “a cualquier vía por la que los proetarras quieran colarse en las instituciones” lo que más celebra Pedrojota Ramírez y así lo pone negro sobre blanco en un editorial que titula: “Mensaje claro a Batasuna: no hay atajos”. A El País, por su parte, le chirría que “por un lado el Partido Popular lance insinuaciones sobre la posibilidad de que detrás del pacto presupuestario con el PNV esté el acuerdo para que Batasuna pueda presentarse de alguna manera las elecciones, y por otro, pacte con los socialistas un acuerdo que lo hace muy difícil”. ¡Cosas de la esquizofrenia política!

Y hablando de pactos presupuestarios, el suscrito por el Gobierno con Coalición Canaria es denostado por la prensa conservadora lo que no quiere decir que se haya olvidado del alcanzado con el PNV que continúa en el candelero.

El Mundo califica de “otro acuerdo vergonzante” el suscrito con los nacionalistas canarios y vuelve a acusar a Zapatero de vaciar “un poco más y para siempre las competencias del Estado”, mientras que Abc habla de “gangas en Moncloa” e ironiza que pactar con el PSOE es participar en una liquidación por derribo, a cuenta del interés nacional.

Y algo tendrá el agua cuando la bendicen… si Zapatero ha creído necesario dar mimos a Patxi López como publica El País para “restañar cualquier posible herida”, cuando tanto desde el Gobierno como desde el PSOE quieren dar la idea de que el lehendakari está encantado con el pacto con el PNV. Al diario de Prisa le suena a premio de consolación.

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