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Los vándalos londinenses mejoran la imagen de los ‘indignados’

Por tercer día consecutivo en las portadas de la prensa española mandan las informaciones y las imágenes de los graves disturbios que sufre Londres y otras ciudades británicas, lo que no impide que los diarios sigan atentamente lo que sucede en los mercados como las compras de deuda española e italiana por parte del BCE, el anuncio de la Reserva Federal de EEUU de que mantendrá los tipos de interés bajos “al menos hasta 2013” o la ‘salida de pata de banco’ de Alemania al aconsejar que los países con dificultades vendan sus reservas de oro para reducir su déficit.

Sobre la explosión de violencia que recorre el Reino Unido, El Mundo dice que “se pueden extraer varias conclusiones” y hace hincapié en que los incidentes han surgido en barrios deprimidos, por lo que “no es difícil adivinar tras ellos un larvado malestar social” señalando que “el paro, la falta de oportunidades y las desigualdades sociales, son la yesca sobre la que ha prendido la chispa”. A pesar de ello dice Pedro J. Ramírez que el “ que la situación pueda explicarse no quiere decir que tenga excusa o justificación” y que “las imágenes de violencia y de robos en comercios que vemos estos días tienen muy poco de reivindicación o de protesta y mucho de delincuencia” y hace notar que “en ese sentido, y salvo las contadas escaramuzas de algunos grupos y el error de tratar de apropiarse permanentemente de la calle, el 15-M está siendo un ejemplo”. Qué disgusto se habrán llevado en Intereconomía cuando hayan visto que un ‘compañero’ conservador como Pedrojota no les sigue la corriente y no comparta la idea que están dando reiteradamente en sus tertulias de que los vándalos de Londres y ‘nuestros ‘indignados’ son lo mismo.

En materia económica lo que más líneas merece es que el Gobierno de Angela Merkel nos aconseje vender el oro, que hay que ver lo bien que se le da a la ‘locomotora’ germana meterle el dedo en el ojo a los países periféricos, esos vagos del sur como creen que somos los ciudadanos teutones. El Mundo afirma que “Alemania nos lee la cartilla: la ayuda del BCE no saldrá gratis” y habla de “libertad vigilada”. A Pedrojota parece no molestarle que los germanos nos saquen los colores, porque, en su opinión nos lo merecemos, pero a Abc le hacen menos gracia propuestas como las germanas que “ignoran que todos formamos parte de un proyecto común”.

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