Los diputados del PP en la Asamblea de Madrid, ahora pertenecientes al grupo no adscrito, e implicados en el ‘caso Gürtel’ van a ser claves en el nuevo reparto de consejeros de Caja Madrid que exige el PSM. Con la salida del grupo popular de estos diputados, el PP perdería la elección de un consejero en la entidad a favor de los socialistas madrileños, ‘poder’ que ha reclamado Tomás Gómez a Esperanza Aguirre en las últimas semanas.
Benjamín Martín Vasco, Alberto López Viejo y Alfonso Bosch pueden ser, sin quererlo, los ‘culpables’ de que acaben los problemas en Caja Madrid. Su salida del grupo parlamentario por su participación en la trama encabezada por Francisco Correa hace que las cuentas no cuadren y los 30 consejeros que debían ser elegidos por los populares deban pasar a ser 29 y la lista de nombres a rellenar por los socialistas tenga que aumentar de 18 a 19.
Este cargo más que estaría en la mano de los socialistas madrileños podría poner fin a las quejas que, durante toda la semana pasada, protagonizó el líder del PSM, Tomás Gómez. Este gritó a los cuatro vientos sus temores de que el candidato del PP a la Presidencia de Caja Madrid, Rodrigo Rato, rompa el consenso al que llegó el PSM con Aguirre para evitar cualquier obstáculo en las elecciones en la entidad siempre y cuando los socialistas obtengan 4 o, por lo menos, 3 puestos en los altos órganos de dirección de la caja. Cuota de poder que peligraba por los planes de Rato para Caja Madrid (no más de dos puestos para el PSM), pero que fue reiterada el viernes por la propia presidenta autonómica.
Para que Rato no rompa la palabra dada por Aguirre, la popular podría aprobar, gracias a la mayoría con la que cuenta el PP en la Asamblea, el nuevo reparto en el que los socialistas logran un consejero más. Decisión de establecer una nueva distribución que se debatirá en la junta de portavoces del miércoles gracias a una iniciativa de los propios socialistas. Esta propuesta se ha podido tomar tras la reunión “de un par de minutos” que mantuvieron Aguirre y Gómez durante los actos del viernes de la Constitución y en la que la presidenta de la Comunidad pidió al socialista calma en torno a Caja Madrid y le aseguró que “se hará lo que pactamos” en el mes de julio.
El motivo por el que la iniciativa procede de las filas socialistas es que así Aguirre se libraría de tener que explicar a su compañero de partido y amigo, Rodrigo Rato, por qué cambia sus planes para la entidad. Modificación en el reparto sin la que el PSM no daría su apoyo para acabar con la parálisis que existe en los comicios de la caja.
