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Los tribunales y las agencias de rating avalan el ‘basurazo’ de Gallardón

Los tribunales y las agencias de calificación respaldan la ‘tasa de basura’ aprobada por el Ayuntamiento de Madrid, dentro de su plan para hacer frente a la elevada deuda. Despúés de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid estimara que el llamado ‘basurazo’ se ajusta a derecho, Fitch ha confirmado los rating a largo y a corto plazo del Consistorio. Un tanto para Gallardón que no podrá apuntarse su gran rival, Esperanza Aguirre, porque la nota de la deuda de la Comunidad ha sido puesta en revisión últimamente.

La agencia de calificación Fitch Ratings ha confirmado los rating a largo y a corto plazo en moneda local y en divisa del Ayuntamiento de Madrid, AA- y F1+, respectivamente. En ambos casos, las perspectivas se mantienen estables.

Según los técnicos de Fitch, la institución municipal madrileña se desenvuelve en el marco de “una economía sólida que se ve apoyada por el estado y posee una base fiscal creciente”.

Sin embargo, los ratios también reflejan alguna incertidumbre en las operaciones y un volumen de deuda importante, acumulado desde 2001, en el que se incluye el endeudamiento de Madrid Calle-30, la empresa participada en un 80% por el Ayuntamiento que fue creada para la renovación de la M30, el principal anillo de circunvalación madrileño.

La economía de Madrid está principalmente orientada al sector servicios. Según las estimaciones de la agencia, la ciudad tiene alrededor de 3.200.000 habitantes.

Según los presupuestos municipales aprobados hoy con los votos del PP, el Ayuntamiento se gastará 9.449 euros al minuto de cada día de 2010, de los que 311 euros se destinarán a pagar la deuda municipal.

En total, la Corporación municipal contará con 4.966,56 millones de euros el próximo ejercicio, lo que supone un 4,21% menos que este año. En cualquier caso, a este dinero hay que sumar los 347,3 millones del Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local (FESS).

Esta partida del fondo estatal se destinará casi en su totalidad a la remodelación del Conde Duque y la continuación de Madrid Río.

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