José Luis Rodríguez Zapatero se reunirá el sábado con 30 importantes empresarios españoles en medio de un clima de desconfianza mutua. Mientras que desde el entorno del Gobierno se responsabiliza del riesgo a seguir los pasos de Irlanda a la acción de nuestras compañías en Portugal, los empresarios han trasladado al Rey, sin conocimiento de la CEOE, su descontento con la gestión del Gobierno. Por si fuera poco, Díaz Ferrán ha manifestado su oposición a la reunión por ‘ningunearle’.
Las relaciones entre el Gobierno y los empresarios no pasan por su mejor momento. Las imposiciones en materia económica y del mercado laboral de Zapatero ha abierto una importante grieta. En las últimas semanas un centenar de presidentes de las compañías más importantes de España han firmado un documento que, bajo el membrete de la Fundación Everis que preside el ex ministro Eduardo Sierra, se ha enviado al Rey Juan Carlos I.
En los 16 folios remitidos al jefe del Estado, estos empresarios recuerdan la importancia del indicador ‘valor-país’ que creció entre 1997 y 2007 y que ha sufrido un importante descenso, exigen el cambio del sistema electoral para evitar el excesivo poder de los nacionalistas y acabar con el descontrol del gasto de las Comunidades y la duplicidad de sus órganos, entre otros asuntos. Unas propuestas que van todas en una misma dirección: poner de manifiesto sus críticas a la gestión del Gobierno de Zapatero.
Esta carta ha despertado tanta polémica que, a pesar de que desde La Moncloa se niega, ha sido el verdadero detonante para que el presidente del Gobierno se ha visto obligado a pasar al contraataque y, tal y como avanzó EL BOLETIN a principios de semana, convocó a 25 grupos empresariales a una reunión la semana que viene. Al final, y ante el aumento de la presión por la situación de la Bolsa y de la prima de riesgo, esta cita se ha adelantado a este mismo sábado. En esta reunión, Zapatero se verá las caras con muchos de los nombres que firman el documento enviado al Rey. De entre los cien empresarios que apoyan este texto lo firman, hay 16 responsables de las 30 compañías que irán a hablar a esta reunión. Iberdrola, Iberia, Repsol, Telefónica, Banco Santander o BBVA, son algunas de las firmantes.
El presidente del Gobierno trasladará a ‘invitados’ como el presidente del Santander, Emilio Botín, el de Telefónica, César Alierta, o el máximo responsable del BBVA, Francisco González, en la cita del sábado la necesidad de movilizar inversión en mercados “emergentes” como Asia, América Latina o Australia. Una inversión en estos nuevos mercados que, según la tesis de Zapatero, traerá consigo pedidos del exterior que crearán empleos en España y activará el consumo nacional. “Se trata de que estas empresas generen empleo, inviertan más y fomenten el consumo interno”, han señalado fuentes de La Moncloa.
Además, según ha explicado el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, en un acto con periodistas parlamentarios, el Gobierno busca “escuchar” y “ayudar” a las empresas ya que son ellas las que tienen “capacidad de regenerar el tejido productivo” y las que pueden arrastrar a las pymes y al sistema productivo.
Más que una foto
Por su parte, los empresarios buscan algo más que una foto en La Moncloa. Las compañías convocadas a la reunión con Zapatero parecen ya tener claro qué quieren de su encuentro en La Moncloa. En declaraciones a EL BOLETIN, representantes empresariales han asegurado que la cita es una “buena iniciativa”, pero “no sirve de nada si no trae consigo propuestas concretas” como la bajada de cotizaciones sociales. “Lo que queremos es que el Gobierno sea claro y tome decisiones como bajar las cotizaciones, reducir el gasto de las administraciones o aliviar el estancamiento” para acelerar la salida “provoque o no un conflicto con los sindicatos”.
En los últimos meses la relación con los empresarios ha sido dispar. Mientras que en verano Emilio Botín y César Alierta defendieron la gestión económica de Zapatero, el Gobierno ha insistido en dejar en el aire el problema del déficit tarifario con el consiguiente enfado de las eléctricas.
En medio de este asunto, el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, ha puesto el grito en el cielo al sentirse ‘ninguneado’ por sus compañeros del sector empresarial que no le han tenido en cuenta a la hora de confeccionar el texto enviado al monarca. La manera de evidenciar su malestar ha sido tachado de “electoralista” la convocatoria a 30 grandes empresarios que ha hecho Zapatero para “acelerar la salida de la crisis”. El líder de la patronal ha recordado que “los gobiernos tienen la obligación de gobernar” y no “el propio interés de unas elecciones cercanas”.
Las críticas del máximo responsable de la CEOE hasta el 21 de diciembre se deben a que, en su opinión, no se ha tenido en cuenta las ideas planteadas por la patronal. Los consejos que escuchará Zapatero de estos 30 empresarios “ya están hechos, están escritos, están en blanco y negro y los tiene el presidente del Gobierno en su despacho”.
“Tiene la CEOE a su disposición, que le estamos aconsejando permanentemente y trasladándole no sólo lo que opinan esos 25, sino de todo el resto de los empresarios españoles”, ha recalcado Díaz Ferrán.
Convocados
Entre las personalidades invitadas hay representantes de todos los sectores. De la banca y cajas, Francisco González (BBVA), Emilio Botín (Santander), Ángel Ron (Banco Popular), Rodrigo Rato (Caja Madrid) e Isidoro Fainé (La Caixa).
Del sector eléctrico, Ignacio Galán (Iberdrola), Antonio Brufau (Repsol), Borja Prado (Endesa), Jorge Calvet (Gamesa) y Salvador Gabarró (Gas Natural-Unión Fenosa).
De las telecomunicaciones, César Alierta (Telefónica) y Francisco Javier Monzón (Indra).
De la construcción, José Manuel Entrecanales (Acciona), Florentino Pérez (ACS), Baldomero Falcones (FCC), Rafael del Pino (Ferrovial), Luis del Rivero (Sacyr) y Juan Miguel Villar Mir (OHL).
Del turismo, Antonio Vázquez (Iberia) y Sebastián Escarrer (Sol Melia)
Del comercio, Isidoro Álvarez (El Corte Inglés), Juan Roig (Mercadona), Antonio Hernández (Ebro Foods) y Amancio Ortega (Inditex).
Para terminar la lista, también irán los presidentes de Anfac, Grifols, Mapfre y Telecinco.
A pesar del abultado número, también hay excluidos.
Aunque el objetivo de esta convocatoria era reunir a una treintena de empresarios relacionados con el Ibex, en esta cita habrá importantes ausencias de compañías que cotizan en la Bolsa española. Así, no se ha enviado invitación a Bolsa y Mercados Españoles (BME), Abengoa, Acerinox, Bankinter, Sabadell, Banesto, Enagás y Arcelor. Junto a estas tampoco está Iberdrola Renovables ni Criteria que sí estarán representadas por los presidentes de sus empresas ‘amigas’ como Ignacio Galán (Iberdrola) e Isidoro Fainé (La Caixa).
Aún se desconoce cómo será el guión de esta reunión, ya que muchas son las propuestas que tienen preparadas los empresarios y que quieren trasladar a Zapatero y muchos, también, los convocados. En el aire queda si alguno de los que asisten se erigirá como el portavoz oficial del grupo. Tampoco se sabe dónde se realizará, en qué sala de Moncloa y el protocolo del encuentro.
