Se acerca el juicio oral contra Baltasar Garzón por investigar los crímenes del franquismo y los medios ya están marcando su posición al respecto. En contra del proceso se sitúa El País, que ayer publicó un duro artículo de Jiménez Villarejo contra la actuación del Supremo y hoy hace lo propio Benjamín Forcano. Enfrente, los medios conservadores, que ponen la lupa sobre los presuntos cobros del juez en Nueva York
La inminente apertura del juicio oral contra Garzón está pendiente todavía de la resolución de las recusaciones que planteó el juez, suspendido de sus funciones temporalmente, contra cinco de los siete magistrados que forman el tribunal que debe juzgarle por presunta prevaricación al investigar los crímenes franquistas sin ser competente. Unas recusaciones admitidas a trámite el pasado día 3 por el magistrado del Tribunal Supremo Julián Sánchez Melgar. Poco antes, el juez Luciano Varela, instructor de la causa, había decidido paralizar el proceso hasta que Sánchez Melgar decidiera.
Algo que puede llegar pronto y, por ello, los medios de comunicación se han puesto a ‘trabajar’. En su artículo de ayer, el ex fiscal Anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo, advertía al Supremo que el juicio al magistrado se le puede volver en contra: “El TS debe saber que cuando inicie el juicio al juez Garzón, la conducta del propio TS también será sometida a juicio por los ciudadanos y la sociedad democrática”. Por su parte, Forcano, hoy en el mismo diario, aclara que “colegas de profesión quieren condenarlo incumpliendo esas tres características: han desoído el clamor del pueblo que enaltece y aplaude a Garzón, han buscado llevarlo al banquillo, sin pruebas, con escandalosa parcialidad”.
De la misma manera, el diario Público se ha hecho eco en varias ocasiones de las voces de los familiares de víctimas que sufrieron crímenes franquistas. En este contexto, Isabel Coixet promociona su película-documental ‘Escuchando al juez Garzón’. Un largometraje con el que Coixet intenta denunciar la “persecución” que, a su juicio, sufre el magistrado. La película agotó las entradas en el preestreno internacional en la 61ª edición de la Berlinale.
Cobros
Garzón se enfrenta a otras dos causas. Una por ordenar escuchas en prisión entre cliente y abogado en el ‘caso Gürtel’ y otra por presuntos cobros irregulares cuando estuvo en Nueva York. Es en este último donde ponen el acento los medios ‘anti-Garzón’, conscientes de que es la única causa que podría tener graves consecuencias para el juez. El Confidencial.com, por ejemplo, aseguró hace unos días que Garzón pudo fraccionar esos cobros para dificultar su seguimiento.
