Soraya Sáenz de Santamaría se está convirtiendo en la presidenta del Gobierno en la ‘sombra’. Según pasan los meses, la vicepresidenta aúna cada vez más poder en su cargo. Tal es así que hoy será ella, y no Rajoy, la que acuda a una cita de vital importancia en Berlín como es la reunión que mantendrá con la canciller alemana Angela Mekel y el ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble. El presidente, por su parte, se queda en Madrid para asistir al Senado.
Santamaría se está perfilando como la candidata perfecta para sustituir a Mariano Rajoy, tanto al frente del PP como en la candidatura a la Presidencia del Gobierno, cuando llegue el día en el que el líder popular diga ‘adiós’. Una fecha para la que, según aseguran en las filas del partido, no habrá que esperar muchos años.
La delicada situación económica unida al paro y al caos en el que vive el PP ha hecho pensar a algunos dirigentes que es posible que Rajoy no llegue ni a las próximas generales.
Se cumplan o no los vaticinios de estos cargos del PP, lo que queda claro es que la vicepresidenta del Gobierno ha movido ficha y se está mostrando como una alternativa a tener en cuenta. Además de controlar el CNI y presidir las reuniones semanales de los Secretarios de Estado y Subsecretarios y participar en la Comisión Delegada para Asuntos Económicos, ahora ha logrado el visto bueno de Merkel y Schäuble para que ambos la reciban hoy.
A las 12 de la mañana, Santamaría se reunirá con el ministro federal de Asuntos Especiales y jefe de la Oficina de la Canciller, Ronal Pofalla, con quien celebrará un almuerzo. Tras esto, mantendrá un breve encuentro con la canciller alemana y, ya por la tarde, será recibida por el ministro federal de Finanzas, Wolfgang Schäuble.
Unas citas en Berlín en las que la vicepresidenta se esforzará por defender las reformas del Gobierno español y la lucha por reducir el déficit.
Todo esto sucederá en un día en el que Mariano Rajoy no saldrá de Madrid. Y es que, frente al transcendental viaje que tiene Santamaría, el presidente asistirá esta tarde a la sesión de control en el Senado más de dos meses y medio sin pisar la Cámara alta.
