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Figar congela los másteres y presume de una universidad más barata que en Cataluña pese a la subida de tasas

Lucía Figar, consejera de Educación

Lucía Figar ha decidido congelar el precio de los másteres universitarios. Según anunció ayer en rueda de prensa, el precio medio del crédito se mantendrá en 43,7 euros para los 14.927 alumnos matriculados en enseñanzas de postgrado. Asimismo, la consejera de Educación presumió de que la región cuenta con tasas universitarias más bajas que Cataluña a pesar de la subida media del 20% que hoy aprobará el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid.

La consejera ha decidido alardear de esta decisión para tratar de mitigar el descontento que ha despertado la subida del 27% en las tasas de las carreras de humanidades y ciencias sociales, del 21,59% en ciencias y ciencias de la salud, y del 13% en ingenierías. Una medida que ha sido muy criticada por los estudiantes e incluso por los rectores de las universidades públicas madrileñas, que consideran que lo que debería hacerse es congelar los precios, sobre todo porque el año pasado las matrículas ya se encarecieron un 38%.

Figar insistió ayer en que para los estudios de grado el Gobierno regional fijará los precios máximos -se decretará un incremento medio por crédito de 4,97 euros-, pero que serán las propias universidades las que establecerán los precios en cada uno de los estudios que ofertan a los 188.719 alumnos matriculados en función de los topes fijados por la Comunidad de Madrid.

Unos precios máximos, dice la Consejería de Educación en una nota, que hacen que Madrid se quede “por debajo de los topes fijados por Cataluña en sus universidades públicas”. Además, remarca que el Ejecutivo autonómico “sigue cubriendo el próximo curso más del 80% del coste total de cada plaza universitaria”.

Además, para tratar de acallar las críticas contra el PP de los miles de alumnos que este año han sido incapaces de pagar la matrícula por la subida de tasas decretada hace un año, y que se enfrentan a la expulsión, Figar ha decidido autorizar a las seis universidades públicas a que apliquen “calendarios y mecanismos propios para flexibilizar el pago de la matrícula”.

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