Si la prestigiosa revista especializada británica ‘The Economist’ está en lo cierto, la posibilidad de que se produzca un plan de rescate europeo para Grecia no tiene nada que ver con la defensa de la moneda única, ni con el compromiso con la idea de la Unión que tienen Angela Merkel y Nicolas Sarkozy. Todo sería mucho más sencillo, lo único que habría pasado tendría una lectura obvia en clave política francesa. En 2012, el actual presidente francés, cuya popularidad no vive un gran momento, puede tener como rival en las elecciones a Dominique Strauss-Kahn, el político francés que ostenta en la actualidad el cargo de director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI).
De modo que nada de protagonismo para el organismo prestamista multilateral. Será la UE, bajo el liderazgo del celebérrimo esposo de la muy bella cantante Carla Bruni quien se encargue de convencer a la ‘roñosa’ canciller alemana de que el Bundesbank tiene que adquirir un buen montón de deuda griega si resultase necesario. Sí, también el Banco de Francia comprará algo. Quizá una cantidad similar al precio de seis fragatas de guerra.
