Opinión

• La semana pasada no faltaron los comentarios que apunta

La semana pasada no faltaron los comentarios que apuntaban lo curioso que resultó que Tomás Gómez convocara por sorpresa un acto con su ‘comité de sabios’ y presentara un manifiesto de apoyo a su candidatura por parte de sus correligionarios. Lo hizo un día después de que se desvelara que la presidenta del PSM, Delia Blanco, rechazó pedir el voto para los socialistas por su política en materia migratoria.

La acampada de Sol, aunque vaya en contra de los principales partidos políticos, sí ha congregado a simpatizantes y militantes de IU. O que lo eran hasta ahora. Porque algunos de ellos han asegurado, contagiados por el éxito de la protesta y sus reivindicaciones, que no iban a votar este domingo a la formación que dirige Cayo Lara debido a que no se “puede jugar a derrotar el sistema desde el sistema y destinando todas las energías institucionales a permanecer en ese sistema”.

Algunos medios han retratado a los protestantes de la Puerta del Sol como okupas y antisistema tutelados por entornos cercanos a la banda terrorista ETA. Sin embargo, hay quien sí ha estado allí y recuerda que entre la cantidad heterogénea de gente se pudieron ver camisetas de la selección española de Fútbol. “Si es que ETA ya no es lo que era”, señalan con humor algunos asistentes.

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