Wall Street intenta dejar atrás la tónica bajista con la que despidió la semana. Tras unos futuros en negativo, las cuentas de Citi, las mejores desde 2007, logran interponerse al pesimismo que han generado las acusaciones de fraude sobre Goldman. No obstante, el mercado tendrá que luchar con los retrocesos registrados por las materias primas.
El sector bancario cuenta hoy con dos protagonistas: Citigroup y Goldman Sachs. El primero alivia, en cierto modo, las presiones sobre el sector al presentar sus mejores resultados desde 2007. La entidad cerró el primer trimestre del año con un beneficio de 4.430 millones de dólares, o 14 centavos por acción, frente a los 1.590 millones ganados en el mismo período de 2009. La cifra se compara también con las pérdidas de 7.580 millones de dólares que Citi había registrado en el cuarto trimestre del pasado año. Esta cifra está muy por encima de la esperada por el mercado, que apuntaba a una situación de ‘break even’ o resultados planos. Los inversores premian estas cifras y hacen rebotar a las acciones del gigante bancario en un 5,7%.
Mientras, Goldman continúa en el centro de las miradas tras las acusaciones de fraude por parte de la SEC. Además, el banco se ha despertado hoy con noticias que apuntan a un posible inicio de investigaciones en Europa.
De vuelta a los resultados empresariales, Eli Lilly ha anunciado que su beneficio trimestral alcanzó los 1.250 millones de dólares, o 1,13 dólares por acción.
