La última reunión del Comité de Basilea acabó con un cero-uno a favor de los bancos, porque estos han conseguido que las piezas clave de la nueva regulación conocida como Basilea III se suavicen y que se retrasen los plazos de aplicación. Según Citigroup los bancos más beneficiados serán Crédit Agricole, Erste Bank, Lloyds, RBS y Société Générale.
Sin embargo, esta estimación no ha tenido el impacto que debiera en los mercados de deuda. Así, los credit default swaps (CDS) de Crédit Agricole han subido en la última jornada un 0,60%, hasta los 119,84 puntos. Es decir, por cada 10 millones de euros, los inversores han de pagar 119.840 euros para cubrirse contra el riesgo de impago de la deuda del banco francés.
Sin embargo, la entidad gala no ha sido la más castigada por los inversores en los mercados de deuda. Los CDS de Unicredit ascienden a 130,80 puntos básicos, aunque muy por debajo de los de RBS, que se encuentran en los 171,45 puntos.
